Silkwood

Interesante, prometedor, emocionante y emotivo relato basado en hechos reales en el que se recoge el estilo de vida de una de las operarias de una empresa nuclear, que llegó a manipular datos sobre su calidad técnica y seguridad para con sus trabajadores.

La película está bien hecha y resulta interesante y evidente en muchos momentos, pero yo me quedo fundamentalmente con la atrevida y certera interpretación de Meryl Streep y con la delicada banda sonora de la película.

No es una gran producción, pero logra despertar el interés del público y ofrecer una trama medianamente interesante e intrigante alrededor de un relato basado en hechos reales, cuya denuncia social e industrial, merece la pena no quede en el olvido.

La historia cae en la reiteración de situaciones y todo me resultó forzado, haciendo que cada vez me fuera distanciando más de lo que se pretendía contar.

Silkwood, queda como una producción de denuncia forzada y manipuladora en todos los sentidos. Una mala y desagradable experiencia que no volveré a ver.

Lo que pasa cuando una mujer difiere, lleva una causa noble, justa en un ambiente liderado por hombres poco ortodoxos y compañías corruptas. Silkkwood es en parte una especie de Biopic centrado eso sí en la lucha de Karen contra su central nuclear buscando básicamente lo mínimo, que eran las condiciones humanas para hacer el trabajo para el que les pagaban. Cine social y de crítica, realmente bien dirigido por Nichols que apela casi al neorealismo para contar su historia de manera natural. Claro ayuda mucho tener a una Meryl Streep en modo Dios y de complemento a Kurt Russell y Cher con buenos personajes secundarios, de hecho, es una pelicula muy adelantada a la época por la naturalidad que tocan temas como el de las relaciones homosexuales. Algo muy secundario, pero bien cuidado. Solkwood es un filme valiente, honesto que reivindica la figura de una mujer y su lucha, da clara muestra que hay que estar lejos de la perfección para tener ética y moral en lo que se hace y dice. Meryl ya lo dije, está sencillamente brutal.