Luna, el misterio de Calenda (Serie de TV)

Ésta, como la mayoría de las series españoles, incurre en el mismo fallo. Tienen un bonito argumento, empiezan bien pero luego pierden el norte. Seguramente se debe a que para asegurarse en caso de fracaso sólo tienen en mente unos pocos capítulos. Luego, sí tienen éxito, les van añadiendo tramas y temporadas. El sistema puede ser seguro desde el punto de vista de las productoras pero para el espectador puede llegar a ser una tomadura de pelo. De este modo al final les sale un galimatías en el que nada tiene sentido. En esta línea el “Barco” se lleva la palma pero como digo el efecto es común a la mayoría de la ficción nacional. A veces es el éxito lo que lleva a alargar la serie como sucedió con “El internado” que nos dejó siete temporadas, lo cual es más disculpable. En el caso que nos ocupa, no lo es, porque han dado el cierre con sólo dos temporadas. ¿Tan mal planteada estaba como para tener que improvisar de este modo?

Sea como fuere “Luna, el Misterio de Calenda” empezó de un modo prometedor. Una intriga policial de tinte fantástico en un apartado pueblo de ¿Galicia? Además, el hombre lobo, lo que le daba un punto de terror a la serie. Confieso que me enganché a "Luna..." con unas semanas de retraso porque me dijeron que no era simplemente policial, sino que había algo raro. Y así era. Claro que como decían los antiguos griegos, ahora no recuerdo bien que autor, hay que esperar a la muerte de un hombre para saber si su vida ha sido dichosa o no. Pues lo mismo con una serie, hay que ver como acaba antes de valorarla. En este caso, el argumento se lía, empieza a mimetizarse con “Crepúsculo”, “Los Serrano” y “El Internado” y a falta de otra cosa mejor, proliferan los sucesos extraños a los que no se le acaba dando explicación o ésta es claramente insuficiente. A la postre el desenlace es flojo precipitado y a todas luces, decepcionante.

Una pena que Antena 3 haya anunciado ya la NO renovación de esta serie para una 3ª temporada. ( Al parecer ya lo único que importa es humillar a la cadena rival, ya no vale con ganar las noches por décimas de audiencias y mucho menos importa los millones de fans que la sigan).

Personalmente echaba de menos una serie así de producto nacional. Esta serie es diferente a todas las que he visto, será por la ausencia de la comedia, que también hace acto de presencia, pero no tan descarada como otras igualmente buenas ( Los Hombres de Paco ). La trama es muy buena, no hace falta que sea real para que no lo sea. Para mi es una muy buena serie, como muchas de Globomedia y Écija. Habrá que ver como la finalizan, ya que tan solo quedan 2 episodios más

¿Alguna vez entenderán las productoras y cadenas españolas que no pueden hacerse series televisivas con episodios de hora y media de duración? ¿Tanto trabajo les cuesta aprender de las lecciones de las producciones norteamericanas o británicas en las que la duración máxima de un episodio JAMÁS supera los 50-60 minutos y que sólo contemplan duraciones superiores en el episodio piloto, que es el que determina si la serie sigue o no?

Pues no, no hay manera de que se lo metan en la cabeza. Y claro, esa obsesión por tener pegado al televisor al espectador durante casi dos horas (publicidad incluida) redunda directamente en la calidad de los guiones y de la producción. Por muy bueno que sea un equipo de guionistas, es una tarea imposible mantener la coherencia interna de la trama, la calidad de los diálogos y el interes del espectador a lo largo de doce o trece episodios de noventa minutos cada uno, y encima tener que hacerlo de forma que se cubran los variados grupos de edad de los espectadores. Ello supone tener que meter mucha paja y muchas subtramas que no tienen el más mínimo interés.

Y claro, si para un rodaje de noventa minutos sólo dispones de un presupuesto limitado que como mucho daría para hacer bien un episodio de cuarenta, pues ya tienes todos los ingredientes para cocinar un nuevo chasco televisivo.

Y eso es "Luna, el misterio de Calenda": un chasco, una chapuza, un despropósito. Pase que el plagio de la franquicia "Crepúsculo" sea evidente (al fin y al cabo lo que se les pide a los guionistas y técnicos es que hagan bien su trabajo, no que sean originales), pase que no terminen de tener claro si lo que quieren es una serie orientada al público adulto o al adolescente...

Pero lo que no se puede pasar, lo que no es de recibo, son esos diálogos insulsos y absurdos (lo de la Blackberry es de traca), esos comportamientos increíbles (véase spoiler), esos groseros errores de documentación respecto al comportamiento de los lobos en estado salvaje (por favor, infórmense en la Wikipedia, artículo "Canis Lupus"), esa falta de garra (nunca mejor dicho), de tensión y de suspense en la lenta, lentísima trama principal de los licántropos o esos groseros errores de ambientación (spoiler).

Y sobre todo por lo que no se puede pasar es por la presencia entre el elenco actoral de ese patético histrión (me niego a llamarle "actor") llamado Fran Perea, incapaz de desprenderse del (único) registro "dramático" que ya agotase en aquella cosa llamada "Los Serrano" (donde también actuaba Belén Rueda): el de chaval gilipollas. No hay forma de creerse su papel de joven Guardia Civil despistado, porque ni el mismo se lo cree ni tiene capacidad para desarrollar ese papel.

En fin, visto el primer episodio, vistos todos. No perdáis vuestro valioso tiempo con esta pseudoserie.

Que pena de serie, con lo que prometía, no sé que es peor, si los actores, el guión, el montaje...
Se ha quedado a medio camino entre "Crepúsculo" y "Al salir de clase" ¿Dónde esta el misterio? Y lo de la hija bailarina, ¿A santo de qué viene? ¿Va a huir de su ligue lobuno atormentado dando unos pasos de baile? ¿ Y qué pintan la mitad de los personajes? Lo único bueno es que Olivia Molina y el hijo en silla de ruedas parecen madre e hijo de verdad, los dos con la misma cara de besugo babeante durante toda la serie, ya pueden estar siendo amenazados de muerte, que merendando, a oscuras, en una fiesta, recibiendo latigazos, la misma cara oiga, hay que valer para eso... Que el mejor personaje sea el interpretado por Fran Perea ya tiene delito...

Mal hilvanada, actores de culebrón, un dramatismo que da la risade poco creible que es, y cero misterio, emoción o atisbo de interés. Se te queda la misma cara que a Olivia Molina, está claro que la rodó antes de tomar all bran...

El aberroncho es un animal salvaje que se esconde dentro de un matorral y enseña su ojo que da miedo. Vive en los montes de Castilla. El aberroncho convierte a una jueza de esas pijitas en jefe de la comandancia de la Guardia Civil del pueblo, a la secretaria del juzgado en tontita monjil, a la Guardia Civil en críos jugando a policías y a los muchachos del pueblo en inválidos y en personas muy seriotas y aburridas que cuentan historias como los abuelos.
La serie se aberroncha en el mismo estilo de todas las demás series nacionales conocidas, aquellas que no son de cachondeo, con el mismo rol de personajes que las demás pero con diferentes escenarios, al menos un poco diferentes..., según el caso.
El aberroncho dice que va a pasar de ver más capítulos. A ver si algún día un guionista con ideas propias, que esté colocado o un poco paranoico hace algo de calidad. Yo propongo que antena3 contrate al genial Fernando Arrabal, creo que es de los pocos que sería capaz de romper de una vez por todas con todos los moldes supervistos a los que nos tienen acostumbrados, haría su Twin Peaks muy dignamente (el aberroncho, él y David Lynch tienen personalidades afines*).
*Nota de la Redacción.