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Rep. Dominicana Su otro amor
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Cine negro. Thriller
Steve Emery (Glen Ford) no cree ni por un momento que su hermano se haya suicidado en Trinidad, así que intenta averiguar la verdad sobre su muerte, actitud que lo enfrenta con su cuñada Chris Emery (Hayworth), cantante en un club nocturno. Desesperado, al verla coquetear con un espía que supone que es el asesino de su hermano, Steve tendrá que actuar con rapidez si quiere impedir que Chris se convierta en la siguiente víctima... (FILMAFFINITY) [+]
20 de octubre de 2011
5 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
1952: Película tropical, tema entretenido, guión coherente y consistente, interpretaciones dignas y notable dirección desarrollando todo el potencial de la película, el cual no era mucho.
1962: Crisis de los misiles en Cuba que puso al mundo al borde de la tercera guerra mundial, seguramente la última. ¿Se basaron los "expertos" de la KGB y/o los matones de la Habana en la película que comentamos? Nunca sabremos cuanto debe la humanidad a Rita. En todo caso, una película muy digna de ser vista.
1962: Crisis de los misiles en Cuba que puso al mundo al borde de la tercera guerra mundial, seguramente la última. ¿Se basaron los "expertos" de la KGB y/o los matones de la Habana en la película que comentamos? Nunca sabremos cuanto debe la humanidad a Rita. En todo caso, una película muy digna de ser vista.
22 de octubre de 2017
4 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
Creo que he disfrutado más leyendo e informándome sobre su contexto que con la película misma. Los dorados años cuarenta quedaron atrás y tras un retiro de unos años Rita Hayworth volvía a ponerse delante de las cámaras, acompañada de su colega Glenn Ford. No es que los años 50 fueran pésimos para la protagonista de "La dama de Trinidad", ahí queda su filmografía, pero no deja de ser raro que una estrella de su tamaño volviera abrazando una producción de serie B. La trama es de lo más simple, con momentos muy lamentables. Ese final por ejemplo es un horror y dejará insatisfecho a cualquiera.
Pero aparece Rita Hayworth, en una plenitud incuestionable, canta sus dos canciones y hasta tiene tiempo de darle una justa bofetada al de siempre. Los que busquen exquisiteces de cine negro clásico saldrán corriendo y los que de repente se sientan indulgentes como yo, acabarán tal vez sobrevalorando una película que no puede compararse con nada que se haga en la actualidad. Y por eso, porque ya no hay Ritas ni un B/N así quedo satisfecho, paso por encima de sus cosas malas y me quedo con la alegría tonta de haber visto una película justita que me ha acabado gustando.
Pero aparece Rita Hayworth, en una plenitud incuestionable, canta sus dos canciones y hasta tiene tiempo de darle una justa bofetada al de siempre. Los que busquen exquisiteces de cine negro clásico saldrán corriendo y los que de repente se sientan indulgentes como yo, acabarán tal vez sobrevalorando una película que no puede compararse con nada que se haga en la actualidad. Y por eso, porque ya no hay Ritas ni un B/N así quedo satisfecho, paso por encima de sus cosas malas y me quedo con la alegría tonta de haber visto una película justita que me ha acabado gustando.
Argylle: Agente secreto
28 de abril de 2018
4 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
Me basta decir que me ha parecido una gran película de cine negro, y me ha encantado, por razones obvias (Rita), y por su parecido en ciertos aspectos con la inigualable Gilda, y solo me queda añadir que, según la he ido viendo, -me ha gustado tanto, que he de confesar que la he visto 2 veces seguidas-, he ido sacando muchos otros parecidos con otras películas que también me encantan, y que paso a enumerar a vuela pluma, intentando no desvelar aspectos importantes de la película:
Parecidos con Gilda:
1.- Obviamente otra vez la belleza de Rita (Gilda antes, ahora Chris Emery), sus bailes, ella de nuevo entre dos hombres que se la disputan, ella una dulce mujercita, sin suerte, en busca de amor verdadero...)
2.- Uno de estos hombres y que repite protagonismo es Glenn Ford (antes Johnny Farrell, ahora Steve Emery), y que en ambas películas comienza en situación de desventaja respecto de su más importante rival, a saber:
3.- George Macready como Ballin Mundson en Gilda y Alexander Scourby como Max Fabian en la presente Dama de Trinidad, personaje éste que en ambas películas está caracterizado como un ser amoral, con un aire bastante amanerado, y rodeado de negocios sucios (tratos con los nazis en Gilda y con los cubanos, a los que se ve que ayuda para construir misiles con los que atacar a USA en esta Dama de Trinidad).
4.- La famosísima escena de la bofetada, bilateral Rita-Ford entonces, pues en Gilda son 2 escenas, en la primera recibe ella y en la segunda él ; sin embargo ahora solo recibe ella.
Y 5.- La equivalencia entre el personaje de Steven Geray (Uncle Pio, impagable sus comentarios llamando Paleto a Ford en Gilda), y Juanita Moore (Dominique) ahora, que siendo los dos personajes que más cerca viven el día a día junto a Rita, son los que dan mejores pistas a Ford sobre qué debe hacer y a nosotros sobre el devenir de la película.
Los parecidos con otras películas los cuento en el spoiler, por no dar pistas sobre el final de la película:
Parecidos con Gilda:
1.- Obviamente otra vez la belleza de Rita (Gilda antes, ahora Chris Emery), sus bailes, ella de nuevo entre dos hombres que se la disputan, ella una dulce mujercita, sin suerte, en busca de amor verdadero...)
2.- Uno de estos hombres y que repite protagonismo es Glenn Ford (antes Johnny Farrell, ahora Steve Emery), y que en ambas películas comienza en situación de desventaja respecto de su más importante rival, a saber:
3.- George Macready como Ballin Mundson en Gilda y Alexander Scourby como Max Fabian en la presente Dama de Trinidad, personaje éste que en ambas películas está caracterizado como un ser amoral, con un aire bastante amanerado, y rodeado de negocios sucios (tratos con los nazis en Gilda y con los cubanos, a los que se ve que ayuda para construir misiles con los que atacar a USA en esta Dama de Trinidad).
4.- La famosísima escena de la bofetada, bilateral Rita-Ford entonces, pues en Gilda son 2 escenas, en la primera recibe ella y en la segunda él ; sin embargo ahora solo recibe ella.
Y 5.- La equivalencia entre el personaje de Steven Geray (Uncle Pio, impagable sus comentarios llamando Paleto a Ford en Gilda), y Juanita Moore (Dominique) ahora, que siendo los dos personajes que más cerca viven el día a día junto a Rita, son los que dan mejores pistas a Ford sobre qué debe hacer y a nosotros sobre el devenir de la película.
Los parecidos con otras películas los cuento en el spoiler, por no dar pistas sobre el final de la película:
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
13 de marzo de 2017
4 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
Película sólida, impecable, trazada con la precisión de un diseño en el que cada pieza encaja sólo cuando se coloca convenientemente.
Muy bien dirigida por V. Sherman, mantiene el secreto de su trama como un tesoro que se va desvelando poco a poco para que la tensión se acentúe a medida que avanza la acción.
Así se asegura de que la intriga cobra todo su significado.
Y habría conseguido una obra casi perfecta si no hubiera incurrido en ese funesto tic de convertir en un poco tontos a los malos y demasiado listos a los buenos.
Estupenda actuación de G. Ford y R. Hayworth que se dan la réplica perfecta y completan una interpretación de lujo.
Muy bien dirigida por V. Sherman, mantiene el secreto de su trama como un tesoro que se va desvelando poco a poco para que la tensión se acentúe a medida que avanza la acción.
Así se asegura de que la intriga cobra todo su significado.
Y habría conseguido una obra casi perfecta si no hubiera incurrido en ese funesto tic de convertir en un poco tontos a los malos y demasiado listos a los buenos.
Estupenda actuación de G. Ford y R. Hayworth que se dan la réplica perfecta y completan una interpretación de lujo.
2 de enero de 2020
2 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Cuarta colaboración entre Rita Hayworth y Glenn Ford, aquella pareja que iluminaran Hollywood entre los 40 y los 50 y que dejaran una marca imborrable con su química para las fallidas generaciones posteriores como ejemplo de lo que debe de ser una pareja en la gran pantalla.
Y es que la química entre los actores actuales salvo en contadas ocasiones está más que muerta.
Rita nos regala el papel de una viuda cuyo marido en Trinidad ha muerto en circunstancias sospechosas, y justo le envió una carta el día de su muerte a su hermano, un Glenn Ford más guerrillero que nunca que viene a enamorar a la Hayworth y a ponerla a suspirar por él, mientras el caso policíaco de la investigación por el hombre asesinado se dispara y él también se enamora de Rita.
El amante de ésta, un hombre adinerado y peligroso intervendrá como el tercero en discordia.
La cinta es la película más floja entre esta pareja portentosa, pero de igual manera se pasa muy bien viendo las escenas de baile y cante de Rita y sus tiras y aflojas con Ford.
La parte de suspense está hilvanada con hilo muy fino y sujeta con alfileres, se ve que esta vez no tenían todo el tiempo del mundo.
Recomendable para los incurables del cine clásico, y los que tengan buen gusto.
Y es que la química entre los actores actuales salvo en contadas ocasiones está más que muerta.
Rita nos regala el papel de una viuda cuyo marido en Trinidad ha muerto en circunstancias sospechosas, y justo le envió una carta el día de su muerte a su hermano, un Glenn Ford más guerrillero que nunca que viene a enamorar a la Hayworth y a ponerla a suspirar por él, mientras el caso policíaco de la investigación por el hombre asesinado se dispara y él también se enamora de Rita.
El amante de ésta, un hombre adinerado y peligroso intervendrá como el tercero en discordia.
La cinta es la película más floja entre esta pareja portentosa, pero de igual manera se pasa muy bien viendo las escenas de baile y cante de Rita y sus tiras y aflojas con Ford.
La parte de suspense está hilvanada con hilo muy fino y sujeta con alfileres, se ve que esta vez no tenían todo el tiempo del mundo.
Recomendable para los incurables del cine clásico, y los que tengan buen gusto.
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