Año mariano

Quizá el problema de "Año Mariano" fue que su surgimiento tras la referida "Airbag" la dotó del prejuicio de lo que no era realmente.

A mi esta cinta no me pretendió un valor satírico religioso, más allá de lo puramente superficial en sus diálogos mismos. Por el contrario, las diferentes lecturas que, personalmente, conseguí sacarle a esta comedia extrema, hablaban más bien de un catetismo español bien sabido... de un país que, sin darse cuenta, se acaba colocando con el mismo humo del cannabis que tan "justamente" destruye.

Y si te piesas fumar un peta mientras la ves... ¡cuidado! no es una comedia guarra de fumetas: esta hierba no te evadirá, sino que abrirá tu mente.

Genial Elejalde.

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"Me viace un porrito, ome"

Pues si, para mi una película para ver, pero claro, para entenderla. Aunque hace de alcohólico al principio, Karra Elejalde ha fumado, no se si fumará ya.
Una comedia sobre España y la marihuana, a lo mejor para ver en ambiente, pero para ver.
Sin demasiadas pretensiones dice muchas verdades sobre los españolitos. No es el humor de "aquí no hay quien viva" es otra cosa.

Siguiendo la línea de "Airbag", Elejalde y Guillén Cuervo debutaron en la dirección con "Año mariano", una comedia entre paródica y crítica, pero dónde sobrevuela constantemente una sensación de cachondeo ligero y nada serio. Es la historia de Mariano (Elejalde), un pobre hombre que por una gran casualidad acabará por ser confundido con una especie de telepredicador profético, al creer la gente que ha visto a la virgen.
Un argumento escuálido, con constantes referencias y chistes, así como dobles lecturas respecto a la maría (marihuana) y a la Virgen María (la aparició mariana se debe a un monumental colocón de cannabis "culpa" de la Guardia Civil) que critica los falsos milagros y profetas; juega con el poder de la religión y de la autoridad; a las sectas y al caciquismo. Hay ciertos homenajes al cine de Berlanga, al spaghetti-western y hasta algún número musical al estilo de "Sonrisas y lágrimas". Una película demasiado larga, en fin, que entretiene y nos tan bufa ni descoordinada como pudiera parecer. Y Elejalde hace un trabajo muy bueno.

Comedia gamberra, de las muchas que se hacen en España, muy apta para ver en cuadrilla después de haber fumado unos porros, pues tiene algunos gags muy divertidos, aunque en conjunto resulta muy mediocre.
Mariano,( Karra Elejalde ) es un pobre desgraciado alcohólico, que sobrevive como puede de la venta de cassetes en los bares de carretera. Un día, tiene un accidente con su coche y va a parar a un campo clandestino de marihuana, justo en el momento en el que la guardia civil procede a quemar ese campo. La gran humareda trastorna por completo a Mariano, que cree ver en ese momento a la Virgen, lo que cambiará por completo su vida.
Transformado pues, en un predicador de la aparición, montará una buena cuando sus seguidores quieran convertir el lugar en un santuario y los periódicos y la televisión hagan acto de presencia, frustrando así, los planes de cierto poderoso especulador inmobiliario ( Fernando Guillén Cuervo ) y enfrentándose a la Iglesia, que no puede dar por válido el milagro, a no ser que ellos mismos saquen réditos del asunto.
Lo dicho, tiene algunos buenos puntazos, ( el vocabulario y la elocuencia de Mariano, no tiene desperdicio ), pero por lo demás, es el típico producto de consumo de usar y tirar.

En otras ocasiones he sugerido ahorrarse el tiempo en verla. Pero en este caso te rogaria que no lo hicieses. No pierdas tu tiempo, salvo que quieras experimentar esa sensación tan desagradable que se siente cuando te la han colado
Apoyado en muchos tópicos de la España cañí se presentan con esta basura de película, que empieza más o menos soportable pero que se desinfla hasta acabar vacía e insufriblemente aburrida.