Indiana Jones y el templo de la perdición

No es la mejor de la saga, pero es la que tiene más acción y la que tiene un ritmo realmente frenético que no te dará respiro. A Spielberg se le da bien entretener a la par que contar historias y aquí lo demuestra una vez más: la historia es interesante y también emocionante. Tampoco el film está carente de humor, el personaje de Kate Capshaw está repleto de momentos graciosos, que si añadimos a sus pequeñas peleas con Indy tendremos un pequeño porcentaje de comedia que yo creo que está enfocado a los más pequeños de la casa.

Harrison Ford tiene sus altibajos en su actuación, pero en general hace un buen papel, aunque para mí el mejor es Dan Aykroyd en una actuación más que convincente. También merecen un apartado los efectos especiales. Pueden parecer anticuados, pero para esa época eran toda una innovación en escenas como en la del avión, o la escapada contrarreloj de la gran corriente marina en el vagon de las minas. En general un film muy divertido y ameno, genial para ver por la noche tranquilito y con algo para comer. Pero se le pudo sacar más jugo. Buena.

7.4

Segunda de las aventuras del intrépido arqueólogo, en la que, como en toda buena trilogía (recién convertida en tetralogía) que se precie, se introducen unas cuantas novedades interesantes; a pesar de ello, en esta ocasión hay muchas luces y sombras, lo que la hace quizás inferior a la regularidad en la excelencia que mantiene En Busca del Arca Perdida. El arranque de la peli es espléndido, probablemente una de las mejores coreografías de cine de aventuras que se hayan rodado: la historia comienza en Sanghai, donde Indy se encuentra a punto de abordar uno de sus peligrosos negocios con el mafioso local Lao Che en un night club; la escena es un prodigio de ritmo, comedia, música y acción, aprovechando para presentar a los que serán los principales partenaires del prota, la cantante Willie (genial Kate Capshaw, una de las mejores gritonas del cine, y para mí superior sin duda a la sosilla Karen Allen como "chica Jones"), y el chinito Tapón (guiño hacia la vuelta de tuerca infantil, evidente en esta peli). Todo lo que sucede desde el "Obi Wan" hasta el aterrizaje en la India es sencillamente genial; lo malo es que el meollo de la historia es bastante menos interesante: el Palacio de Pankot, la secta Thuggie adoratriz de Kali, y las piedras de Sankara mantienen el elemento esotérico propio de la saga, pero muy inferior, a mi entender, al de la primera "misión" de Indiana. A pesar de ello sigue habiendo multitud de escenas brillantes, como la del puente, combinadas con otras muy vulgares: no me gusta en absoluto ver a un Indy convertido en un Seagal o un Chuck Norris de baratillo, dando mamporros a los malvados, y lo de los niños indios esclavos más que dar lástima es una muestra de una sensiblería cutre. Pero no dejemos que las nubes nos impidan ver el horizonte, estamos ante una estupenda peli de aventuras, entretenídisima y apta para público de cualquier edad.

Segunda buena parte del Doctor Jones, aunque la historia no tiene el gancho de la primera parte, los sustituye con dosis de acción desenfrenada: el Pub Obi Wan, las peleas en las minas, la persecución de las vagonetas, la ceremonia a Khali, etc, etc, etc...

La banda sonora cumple y además creo que se encarga de sostener buena parte del peso donde el argumento o la acción no son suficientes. Aún así y, aunque en mi opinión, esta sea la más floja de las tres películas, es digna de su nombre.

Por cierto, increible el efecto sonoro de los puñetazos; parece que esten partiendo melones a hachazos. Es para morirse de risa. Ni que Indiana Jones fuera pariente de Bud Spencer.

Como era la época de Indiana pues la he visto otra vez. Qué decir, a mi estas de aventuras me encantan. El personaje es rollo intelectual pero machote salvaje, me encanta y al mismo tiempo todo un ligón. Lo tiene todo, además esta es divertida con el niño de acompañante “no haber problema”.

1935. Tras un incidente en un club nocturno de Shanghai con los miembros de la mafia china a causa de un diamante, Indiana acabará en un poblado hindú en compañía de una cantante del club, Willie Scott, y de su pequeño amigo de 12 años, Tapón. Allí los aldeanos creen que los malvados espíritus de Pankot son los responsables del secuestro de sus hijos, a causa del robo de la piedra sagrada del pueblo. Indiana tratará ahora de recuperar la piedra pero se verá en problemas con una sanguinaria secta de adoradores de Khali.

Segunda entrega de las aventuras de Indiana Jones, mucho más entretenida, más divertida y tan trepidante como su antecesora. Inolvidable música de John Williams, espectaculares efectos especiales de Lucas Arts y magnífico sonido y montaje. ‘Indiana Jones and the Temple of Doom’, aunque es la peor de la trilogía, es un ejemplo de cine de entretenimiento de calidad. Tampoco se la pierda.