Miyamoto Musashi y los 400 samuráis

1935, Eiji Yoshikawa escribe y publica su obra Musashi.

1955, Hiroshi Inagaki dirige a Toshirô Mifune en "Samurái 2: duelo en el Templo Ichijoji".

Y entonces llegamos a 2020. El año de la pandemia. Año del confinamiento mundial. Año infausto. Yuji Shimomura dirige a Tak Sakaguchi (especialista, coreógrafo de escenas de acción, artista marcial) en una recreación del enfrentamiento de Miyamoto Musashi contra los miembros de la escuela más famosa de la ciudad de Kioto. Creo recordar, que ya había eliminado a los anteriores maestros de la escuela y que la situación había derivado a que el sucesor era un niño al que se enfrenta en este duelo mientras una ingente cantidad de seguidores de la escuela le esperan en una emboscada.

Lo que se cuenta en la película es lo que pasa a partir de ese momento, sea verdad o no, en una secuencia de acción que pasa de la hora. Poca variedad de golpes, poca espectacularidad, pocos diálogos... incluso diría que se podían haber esforzado un poco más en el manejo de los iaitos, duelen bastantes de las cosas que hacer para un practicante de iaidō o de kenjutsu.

Pues eso, si me vendieron que 1917 estaba realizado en un plano secuencia, "El arca rusa" si esta en un plano secuencia, o que "La Liga de la Justicia" de Zack Snyder, que son 4 horas de acción, son peliculones y esto, que no deja de ser igual en su concepto pero con mucho menos dinero, es basura, apaga y vámonos.

Recomiendo llevar en una papel la cuenta de cuantas veces mueren los mismos "extras"