Gun Hill Road

No es una historia de las que se dice del cine: “es mentira”. Seguro que ha sucedido, y sucederá, un millón de veces en la realidad. Cualquier parecido con hechos, lugares o personas, no es una casualidad, no es una ficción. Aun estando en total desacuerdo con el comportamiento del padre, creo que es cargar demasiado la culpa, -ya está mal considerarlo culpa- en la ausencia del padre y en su actitud homófoba. Michael se siente mujer y eso es lo que hay que aceptar; de ninguna manera culpabilizar a nadie por sus sentimientos. Por lo demás todo el dramatismo de la película esta muy bien llevado por sus intérpretes, hasta los muy secundarios, y por supuesto el/la protagonista, que sufre unos magníficos cambios, no solo físicos, sino de comportamiento y de expresión de sentimientos. El papel del padre es difícil, por lo que tiene de actitud negativa y homófoba, pero Esai Morales lo borda y llena la pantalla con solo su presencia. Rashaad Ernesto Green dirige con mano algo blanda, por lo que en algunos momentos puede provocar alguna lagrimita, pero para ser su primera película deja muy claro que sabe mucho de cine, de historias, de actores y, sobre todo, de espectadores. Te engancha desde el primer momento.