Danny Says

Pésima traducción y peor manejo de subtítulos llegando estos a superponerse con otros textos en inglés haciendo imposible su lectura.
Repaso a la vida de Danny Fields que finaliza cuando descubre al grupo que incrementará su cuenta bancaria. Aparte de la aparición ex profeso del propio Danny para esta ocasión, le podemos ver en otras entrevistas y en conversaciones telefónicas.
No se echa de menos la aparición de familiares, recurso bastante extendido en otros documentales, sobretodo si no quieren aparecer o nada aportan, aquí los personajes compartieron vivencias con Danny destacando el alto ejecutivo de Electra con el que tuvo que lidiar Danny empleado intermedio entre grupos como MC5 o los Stooges belicosos a renunciar que una canción durara siete minutos o a eliminar un motherfucker como título de un tema. No os perdáis también el substrato que queda del fichaje de los Doors, en el que tuvo que ver más la guapura de su cantante que su música.
Brendan Toller acompaña su documental de los clásicos recortes de prensa, fotografías, apariciones televisivas y algunas secuencias animadas que sobran al recalcar lo evidente ¿Que creéis que aparece cuando dice que dejó las llaves debajo de la alfombrilla del coche? ¡Muera la imaginación!
¿Anécdotas? Una catarata, desde la alusión a los genitales de Jim Morrison más adecuada para un programa de Telecinco a la aparición fugaz de Eddie superstar Sedgwick warholiana musa. Entre mis favoritas: Los Ramones discutiendo en el CBGB sobre que canción tocar, con resolución democrática y la imitación del propio Danny de Nico tocando el clavicordio una de las muchas salidas humorísticas de Danny en el reportaje.
Más que interesante este Danny Says para los amantes del universo pop americano de los sesenta y mediados de los setenta. Ojo, la identificación de los Ramones con Danny Fields es mínima, objetivo de otro documental así que si dispones de dos horitas para gastar no te lo pierdas y digo bien 120 minutos pues es lo que necesitarás entre rebobinar y congelar la imagen debido a la dejadez de alguien que no puso atención a su trabajo.