El hombre errante (Miniserie de TV)

"Nowhere Man" no empieza nada mal. Un primer capítulo un poco confuso pero que mantiene en vilo al espectador. Sin embargo, a medida que avanzamos hasta el octavo y último episodio la serie se torna en un vulgar drama, sobreactuado y previsible. El argumento está lleno de clichés del género, muy influido por las películas hongkonesas de los años 90 -que al mismo tiempo rememoraban las de los 70-. Pero lo peor de todo es que no solo no se aleja nada de estas películas, si no que busca parecerse todo lo posible a ellas, lo que no está mal pero hace que la serie carezca de interés por su trama o sus personajes. Todo es demasiado plano.

Lo que sí resulta atractivo es como ha sido llevado a cabo el apartado técnico. La fotografía oscila entre tomas muy parecidas a las de la saga "The Raid" (Gareth Evans) y el romanticismo melancólico de autores como Wong Kar-wai o Tsai Ming-liang, lo que aporta algo de frescura al género. El vestuario, los emplazamientos y la banda sonora son apartados que también están más logrados que el guion.

Lejos de estás características la serie da para poco más, por lo que seguramente el pensamiento que pase por tu cabeza mientras la veas sea el de "esto ya lo hemos visto antes".