Corazón de medianoche

Carol (Leigh) es una joven de inestable salud mental, que hereda de su tío un club nocturno.Tras ello, decide trasladarse a vivir allí... Premiada en Sitges en su día, hoy se ve como un simple, coyuntural y muy mediocre thriller psicológico, insostenible por la mala interpretación y la propia dirección de Chapman. Lo fundamenta casi todo en la atmósfera y al misterio, pero apenas se salva con dignidad algún momento. En síntesis, típico film de los 80, cercano al bodrio más que a otra cosa.

Producto que sobre el papel puede parecer interesante y llamativo, pero que según se va desarrollando todo va perdiendo fuerza e interés progresivamente. Es de esas producciones de calidad mediocre que no termina de contar nada realmente interesante, haciendo que todo sean cosas raras sin llegar a convencer.
Floja en muchos de sus puntos, tanto el interpretativo como el técnico.
Pesadillas, recuerdos, violaciones, historias peculiares y ninguna va a ninguna parte clara, Todo es demasiado raro, parece que la cosa es complicarlo todo, para no contar nada.
No me ha llegado a enganchar en ningún momento y ha sido una perdida de tiempo total. No tengo claro lo que me han querido contar y eso no dice mucho en su favor. No volveré a ver Corazón de medianoche.
Puede ser una mala elección para alguien que busque un entretenimiento ligero.

Película bastante original con unos buenos giros en el guión. Pero estas sorpresas quedan camufladas ya que el ritmo de la película es lento y a veces aburre, alejándote del personaje principal y haciendo que el clímax de la película haya perdido interés, por muchos giros inesperados que tenga. Buenas interpretaciones, sobretodo por una actriz que estaba muy de moda a finales de los 80's y principios de los 90's, Jennifer Jason Leigh, quienes muchos recordaremos por su papel de loca en Mujer Blanca Soltera Busca, un papel que ya había desempeñado en esta película unos años antes pero en categoría de protagonista, en vez de antagonista.
La película, o más bién los obstáculos a los que se enfrenta Leigh, no dejan de ser los mismos que en La Semilla del Diablo, ya que al principio hace cuestionar al espectador sobre su cordura para acabar con un enemigo múltiple bastante parecido a la secta a la que se enfrenta Mia Farrow en el film de Polanski.

Aburrida tontería que no atrapa en ningún momento. Cuando busca inquietar con malos efectismos produce risa, es una película en la que no te implicas puesto que el cariz psicológico de los personajes es inexistente. Así es imposible generar ningún tipo de tensión.

La historia es de lo peorcito, la realización tampoco me inspira palabras positivas y las interpretaciones son horrendas con Jason Leigh a la cabeza; acapara el 90% del metraje y su presencia no transmite nada, solo tedio a raíz de un personaje mal planteado. Aunque me temo que a pesar de que aún era muy jovencita, eso último se debe al lamentable guión, que le brinda a la oscarizada actriz su papel menos interesante.

Excelente y desconocida película de culto que ganó el premio de mejor película en el festival de cine fantástico de Sitges. La banda sonora es brillante y maravillosa de manos del compositor Yanni, consigue envolvernos en ese ambiente inquietante y desconocido. Carol Rivers hereda el night club de su tío, ella una chica algo particular decide hacerse cargo, pero al llegar a ese extraño lugar sentirá como si las paredes tuvieran vida propia, ruidos que surgen de la nada, habitaciones sadomasoquistas, esencia perversa en cada rincón. No es una obra maestra y tiene algunos defectos (por ejemplo en una escena se ve el micrófono), pero obviando esas pequeñeces la recomiendo para amantes de lo desconocido, una joya del cine de culto.