Jenifer (Masters of Horror Series) (TV)

Hoy en día, muchos son los que se quejan del terror de manual, que sí "a esta niña del pelo largo ya la habíamos visto", "lo del novio asesino está demasiado visto" o "joder, que patosa es esta muchacha, normal que siempre mueran", pero paradójicamente, cuando surgen films como "Jenifer" siempre aparecen los defensores de ese terror de manual para informarnos de que no cuenta nada, no produce temor alguno (la pregunta es, ¿actualmente algún film produce algún tipo de temor, amen de algo de angustia, desasosiego y demás?) y la historia ya nos la habían contado.
Y servidor se pregunta: "¿Y?", ¿contaba algo "Aflicción"? ¿contaba algo "Deliverance"? En teoría seguramente no. Sin embargo, no por ello dejan de ser peliculones que nos hablan sobre la descomposición de un ser, igual que sucede en "Jenifer" de Dario Argento aunque, para qué nos vamos a engañar, no les llega ni a la suela de los talones, ni lo pretende, vamos.
¿Que la historia nos la habían contado? ¿No nos habían contado también "300" mediante "El león de Esparta" y la gente aplaude a rabiar? ¿No nos habían contado también "The ring" suficientemente bien los japoneses? ¿o Gladiator? ¿o Braveheart? Sin embargo, ahí está la muestra de que el cine es repetición y reiteración actualmente.
En cambio, cuando un realizador intenta dar otro cauce al trilladísimo género de terror, se le lapida soltando sutilezas como esas y aplaudiendo, en cambio, los últimos hits del terror americano o de los pestilentes remakes con los que nos bombardean ("Pulse", "El grito", etcétera..)

Sinceramente, el último film de Dario Argento no me parece una gran película, ni mucho menos, en cambio considero que tiene lo suficiente como para aportar un grato entretenimiento, dejando un par de inquietantes momentos y un final que, por previsible que resulte, mola que te cagas (hablando en plata).
No es que pretenda defender a Argento a puñal, aun y siendo uno de mis favoritos, pero es que uno recorre esta web leyendo ciertas lindezas, y luego ve como peliculillas de medio pelo tales como "El motorista fantasma", "Pulse", "Jeepers creepers y demás reciben alabanzas y no puede resistir replicar.
Y después de soltar verdades como puños, paradójicamente, esta crítica será fusilada.
Gracias señores, y saludos.

Miedo me daba ver el episodio del sobrevalorado Dario Argento, aunque si me dicen que “Jennifer” está dirigido por cualquier otro me lo creía a la primera.
Nada de giallo ni asesinos con guantes negros que se relevan al final de la película de manera ridícula, “Jennifer” es un thriller erótico gore.

Argumento (alternativo):
Un policía salva a la niña de “The Ring” crecidita y rubia de las manos de un psicópata. Se descubre su rostro y terrible pasado: fue Miss España, pero una sobredosis de botox y numerosas cirugías de oferta la desfiguraron.
El giro con el que la historia comienza es la rigurosas dieta con la que la ex Miss España ha conseguido ese cuerpazo de actriz porno: carne de felino y...

A partir de ese momento “Jennifer” se convierte en un relato bizarro-erótico-freak salpicado de casquería e intestinos con homenaje a Frankenstein incluido.

En la recta final da un bajón por la ausencia de tetas, sexo freak y casquería para remontar con el vuelo a base de gore truculento y un predecible final.
Mejorable entretenimiento.

Puntuación: 4,75 / 10

Llevo tiempo leyendo y escuchando que lo mejor de esta serie es "Cigarrette Burns", y no digo que no sea magnífica, pero incluso teniendo esa predilecciión por Carpenter, y que sea cierto que es una joyita; recomiendo a cualquier amante del cine fantástico a ver este otro episodio. Quizás haya temas ya vistos, pero el cine es precisamente eso; como se cuentan las cosas. Y sinceramente, sin tecnicismos, Argento, lo hace magistralmente, crea una historia inquietante, y aterradora en algunos momentos. ... hay que verla.

Parte de la misma premisa que una película del año anterior, "Seres extraños", en la que también podíamos ver a un pibón de muy buen ver -y mejor palpar- que sigue una dieta poco aconsejable (y, en este caso, con un cuerpo de infarto pero la cara aún más), aunque sin el surrealismo extraño de la peli oriental, pero también con una notoria ausencia de argumento.
Las interpretaciones son bastante casposas (en especial el que hace de compañero del prota, que menos mal sale poco), el guión se podría copiar en letra gótica sobre el canto de un palillo, y de miedo nada de nada. Si acaso, alguna escena estomagante de aquellas que hace treinta años hubieran hecho potar al respetable, pero que hoy en día no te hacen sino intentar comprobar de que calidad es el latex empleado.
Llena de situaciones inverosímiles, sin ningún tipo de lógica y carente de interés, lo único salvable es el cuerpazo de la prota y su corta duración.

Por cierto: nótese que he escrito "pibón" y "surrealismo", y no "pivón" ni "subrealismo" como ya he tenido que leer en esta web infinidad de veces, y que hace incluso daño a la vista. Igual que es aconsejable leer las críticas ajenas antes de accionar alegremente el "NO", también es muy sensato releer lo que uno escribe antes de darle al "ENVIAR".

Dario Argento está al frente del que es el capítulo más diferente de Masters of Horror de los cuatro primeros. Se aleja de esa atmósfera de terror de los años 80 que tuvieron las anteriores ediciones de la particular recopilación de maestros del terror para traernos una extraña mezcla entre el Splice de Vincenzo Natali y el Marebito de Takashi Shimizu.

Lo cierto es que no me extrañaría nada que Vincenzo Natali sacara la idea para Splice de este engendro llamado Jenifer, porque las similitudes entre ambas películas son bastante cercanas. Tras haber visto ambas, con un resultado más que amargo para mi (aunque Jenifer me gustó más), pienso que lo que no me gusta de ambas películas es la idea en sí, pareciéndome desagradable y de algún modo retorcida, cosa que supongo es de aplaudir porque imagino que entre los objetivos estaba precisamente transmitir esa sensación.

Pero el verdadero problema no es que me resulte desagradable, el problema es que no me lo pasé bien viendo la película. Se puede transmitir una sensación de asco y repulsa y a la vez hacer que el espectador disfrute, pero en este caso no encontré razón ninguna para ello.

Por lo menos Dario Argento hace una película de calidad, lejos de lo que podría esperar en un principio, con actuaciones correctas y ritmo también adecuado a pesar de repetirse en demasiadas ocasiones el mismo recurso. Película curiosa y la más diferente de cuantos Master of Horror había hasta la fecha, pero que a mi simpleente no me gustó.