“Free Guy” parte de un videojuego creado por dos amigos, por lo que al principio de la película no me sorprendió mucho. Sin embargo, cuando nos adentramos en ella vemos que un tipo de camisa azul (Guy) nos define puesto que lleva una vida de rutinas. Él, es un personaje de fondo que tiene una programación determinada. Por alguna razón, empieza a realizar su vida dentro del videojuego y gracias a los increíbles efectos de imagen nos adentramos en su mundo. También, destacar el uso de personajes ficticios y reales que crea el contraste verdadero de la película. Sin embargo, la mezcla que observamos de diferentes películas no me parece real. Cuando Guy saca la espada láser o el puño de Hulk, no hace una buena reseña a esas películas puesto que no es tan real como lo hemos visto. Por ello, creo que eso es un aspecto que sobra o incluso lo considero un fallo.

A medida que la historia avanza, en el mundo real vemos como los creadores del juego se ven en una situación intensa contra su supuesto creador. Ellos intentan hacer cualquier cosa para ver que su primer código sigue en el juego. Así, la película sigue su curso, y nuestro protagonista se da cuenta de la realidad, una de las mejores partes, descubre que su vida es un juego y que su mundo es virtual, creado con números de programación.

Todo se arregla al final, y así, con escenas de amor, de acción y de comedia, “Free Guy” es una película muy interesante para los tiempos que vivimos ahora con los videojuegos y el mundo real. Es cautivadora y divertida y aunque se piense que es para un público más joven, se la recomendaría a todo el mundo por la entretenida historia que cuenta.