Tras meses esperando el estreno y tras poder evitar tragarme algún spoiler (lo cual es sumamente difícil hoy día con las redes sociales), fui al cine como fan incondicional para ver qué nos deparaba esta nueva entrega. - ¿Quién será Snoke? ¿Quiénes son los padres de Rey? ¿Se pasará Luke o Rey al lado oscuro? ¿Saldrá algún personaje de antaño para los más nostálgicos? Todas estas preguntas nos tenían en vilo a la mayoría de los fans que estábamos en la sala.
Al terminar me he quedado como: Disney, ¿qué has hecho? La peor película de la saga en cuanto a guión se refiere. Puedo decir que, incluso, muchas de las precuelas superan de largo el hilo argumental de esta película así como la caracterización de muchos de sus personajes. Muchas partes de la película son aburridas, lineales y se espera qué va a suceder. Esto ocurre por el exceso de protagonismo que se le da a los personajes secundarios (Poe, Finn,...etc), quitando metraje de lo que realmente nos importa a los verdaderos fans: Apasionantes duelos láser, tramas oscuras, tentación del reverso tenebroso, giros argumentales creíbles...etc.

Dos cosas que suceden en la película hacen que mi fe porque la IX salve esta nueva triología se vea truncada. Sinceramente, Star Wars murió con las precuelas allá por el año 2005, esto no es Star Wars.

Se salva:

- La actuación de Adam Driver. En esta entrega, su personaje es más maduro, muestra mejor caracterización y da unos giros argumentales inesperados.
- La caracterización de Mark Hamill. No creo que estemos ante su mejor caracterización como dicen muchos medios, pero sin duda, lo ha hecho bien. Se echa de menos muchas cosas de su personaje de antaño, pero cumple con lo esperado.

Tras cinco largos años esperando saber qué pasó con David y la Dra. Elizabeth Shaw, Alien Covenant nos adentra en una historia mucho más oscura que su predecesora, donde sin duda la fotografía, el sonido y la dirección de Ridley Scott nos hace recordar con cariño esas notas de suspense y terror magistralmente orquestadas en el Octavo Pasajero. Sin duda, Alien Covenant ofrece al espectador una historia mejor contada y orquestada que su predecesora, donde Michael Fassbender roba todo el protagonismo de la cinta a los demás personajes, incluida Katherine Waterston. La actuación de Fassbender roza la excelencia, con un personaje que esconde mucho más de lo que ya pudo verse en Prometheus y que en esta segunda entrega, cobra vital importancia. En este sentido, la actuación de K. Waterson de desvanece por momentos en la cinta debido a esto pero, sin duda, algunas escenas nos recodarán a la teniente Ripley.

En cuanto a la historia y sin entrar en spoilers, esta nueva entrega nos ofrece mucho más suspense, acción y gore que la anterior. Todo ello, sumado a un guión mejor llevado que en su predecesora, nos harán entender cosas que se quedaron en el tintero en Prometheus y que, sin duda, hará que el espectador entienda los verdaderos orígenes de Alien. La fotografía, como he mencionado antes, es simplemente sublime y hará que el espectador sienta que está presente en esos frondosos y húmedos bosques donde, quien sabe, puede que haya algo observando.