Brian De Palma es un excelente director, no hay dudas. Su estilo visual es impactante y el modo de contar sus historias posee unas características que pocas películas poseen. Y lo demuestra y con creces en esta, más que espectacular, maestra adaptación de la famosa serie de televisión (que daría pie a una irregular trilogía), que se convirtió en un exitazo instantáneo.
Tom Cruise cuando quiere da lo mejor de lo mejor, (bueno, quizás haya alguna duda respecto a eso) y aquí lo demuestra, estando en su salsa, con su carismático Ethan Hunt, protagonizando algunas de las escenas de acción más famosas de todos los tiempos.

En definitiva, no os perdaís por nada esta joya del suspense, que merece aún más reconocimiento del que se le ha dado.

La última entrega de Brosnan fué una entrega lograda a medias. Aunque Lee Tamahori sabe dirigir la acción de forma excelente y con buen pulso, la película en sí es muy fantasiosa y repleta de explosiones atronadoras que saturan un poco el argumento.

Pero aún así, el entretenimiento manda, y la película es entretenida como la que más.
Aunque no hay suspense, sí hay explosiones emocionantes y de las que te clavan en el asiento.

A esto yo lo llamo cine de evasión o puro entretenimiento.

Esta segunda misión desmerece clarísimamente en comparación con la maestría de la anterior, pero no estoy de acuerdo con las críticas muy negativas (que han sido la aplastante mayoría).
Esta misión no es para pensar, no es para nada intrigante, ni posee ni una gota de suspense o de sorpresa.
Es claramente un ejercicio de acción. Acción purísima y durísima.
La trama, si se la hubiese sacado jugo sería fantástica, se mantiene como telón de fondo y logra mantenerte evadido las dos horas que dura. Tom Cruise nos demuestra que está en una forma estupenda y que su Ethan Hunt es el rey. Y el resto es un desfile de acción y explosiones tan maravillosamente ejecutado que subsana las deficiencias del guión (que son muchas, la verdad).
Esta secuela es perfecta para el que no quiera pensar y sólo deleitarse con el delirio alucinante de explosiones que se suceden en la pantalla.

El regreso de Bond tras un punto y aparte de seis años, supuso un buen regreso, mejor de lo que algunos esperaban y cercano al Bond clásico de la mejor calidad.
El filme en sí es bastante bueno y muy entretenido. Incluye además algo de suspense, aunque se le echa en falta algo más de fuerza en determinados momentos.
Y Pierce Brosnan sabe dar una gran interpretación del personaje, siendo un Bond fuerte y creíble, aunque ampliamente superado por el maestro Daniel Craig.

Es una buena película, de las más reivindicables de la saga, pero aún así opino que por algunos comentarios está algo sobrevalorada.

Bueno, abro este ciclo sobre Batman, advirtiéndo de que sólo ví hasta ahora las dos primeras de Burton y las dos últimas de Nolan.

Así pues, empezamos por orden y con la primera entrega de todas, que resultó ser una muy buena entrega, realmente muy entretenida y efectiva.
Se nota que revolucionó en buena parte el cine de superhéroes y se merece el gran éxito que obtuvo. Encima todo está muy bien llevado en la película, desde el aspecto oscuro y barroco de Gotham City, hasta el nivel artístico, con unos trajes y unos maquillajes muy buenos.
El guión también está muy bien armado, aunque se nota mucho que más que concentrarse en Batman, aunque a este le hace mucha justicia y está muy bien interpretado por Michael Keaton, a quién el guión le regala más protagonismo y varios de los momentos más míticos de la película es al Joker majestuoso del gran Jack Nicholson.

Pero aún así, todo está más o menos muy bien equilibrado y bien realizado.
Y la música de Danny Elfman es inolvidable.