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Voto de Isildur:
3
5,8
37.494
Aventuras. Drama. Bélico. Romance
Año 1939. Lady Sarah Ashley (Nicole Kidman) es una aristócrata inglesa frívola y superficial. Un matrimonio sin amor y sin hijos le ha privado de todo lo que que no sea su cuadra de caballos. Convencida de que su marido le es infiel, Sarah viaja desde Londres hasta Darwin, en Australia, para enfrentarse con él. Su guía, Drover (Hugh Jackman), es un ganadero tan tosco como refinada es Sarah. La profunda antipatía que se profesan se ... [+]
19 de mayo de 2009
6 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
Quiero empezar hablando de los trailers. Gran acierto el del su montajista, pues tras dos horas y media de metraje tienes la sensación de haber visto exáctamente lo que nos prometían: una película épica, romántica y de época... a la par que pretenciosa, vacía, aburrida, y... potable (en el concepto de "apto para ser potado"). ¡Ole por los tráilers!
Luhrman es sinónimo de ambición, y echando un vistazo atrás a su carrera se comprueba. Con "Moulin Rouge", un producto muy similar al que se critica con un plus de canciones pegadizas, sus ansias de logro resultaron más o menos satisfechas: llegó a la carrera por el (su) codiciado óscar y su película consiguió nominaciones tanto en categorías importantes como técnicas (las segundas realmente meritorias), y digo más o menos porque resultó el gran perdedor de la noche. Pero con "Australia" se va a quedar con las ganas de ver una película suya triunfar. Seguramente, Luhrman siga intentando resolver la incógnita de la ecuación del éxito, pero no se da cuenta de que su ecuación está mal planteada.
Y claro, en Australia, matemáticos o no, vemos sus fallos. El film es una mezcla de géneros que en realidad forma un conjunto, digamos, "armonioso", resultando una épica "aceptable". Pero es tan pretenciosa que hay momentos que resultan vomitivos.
Primero, Luhrman pretende hacernos reir en los primeros minutos de la película con un montaje acelerado en la presentación de los personajes (tal y como hizo en "Moulin Rouge"), que, como era de esperar, nada originales: la ricachona repipi que acaba siendo todo lo que ella odiaba y el guaperas arrogante. Y estos personajes en esta historia hace que actores que regalaron momentos en pantalla deslumbrantes nos den arcadas. Efectivamente, hablo de Nicole Kidman. Decían algunos que Australia era la oportunidad de ver a Kidman en un buen papel tras sus últimos intentos fallidos en "Embrujada" o "La Brújula Dorada" (que por cierto, brinda una mejor interpretación en la bazofia de Chris Weitz)... JA. Una actriz en declive, a ver qué pasa en "Nine".
(Sigue sin spolier, aunque tampoco no hay nada que destripar).
Luhrman es sinónimo de ambición, y echando un vistazo atrás a su carrera se comprueba. Con "Moulin Rouge", un producto muy similar al que se critica con un plus de canciones pegadizas, sus ansias de logro resultaron más o menos satisfechas: llegó a la carrera por el (su) codiciado óscar y su película consiguió nominaciones tanto en categorías importantes como técnicas (las segundas realmente meritorias), y digo más o menos porque resultó el gran perdedor de la noche. Pero con "Australia" se va a quedar con las ganas de ver una película suya triunfar. Seguramente, Luhrman siga intentando resolver la incógnita de la ecuación del éxito, pero no se da cuenta de que su ecuación está mal planteada.
Y claro, en Australia, matemáticos o no, vemos sus fallos. El film es una mezcla de géneros que en realidad forma un conjunto, digamos, "armonioso", resultando una épica "aceptable". Pero es tan pretenciosa que hay momentos que resultan vomitivos.
Primero, Luhrman pretende hacernos reir en los primeros minutos de la película con un montaje acelerado en la presentación de los personajes (tal y como hizo en "Moulin Rouge"), que, como era de esperar, nada originales: la ricachona repipi que acaba siendo todo lo que ella odiaba y el guaperas arrogante. Y estos personajes en esta historia hace que actores que regalaron momentos en pantalla deslumbrantes nos den arcadas. Efectivamente, hablo de Nicole Kidman. Decían algunos que Australia era la oportunidad de ver a Kidman en un buen papel tras sus últimos intentos fallidos en "Embrujada" o "La Brújula Dorada" (que por cierto, brinda una mejor interpretación en la bazofia de Chris Weitz)... JA. Una actriz en declive, a ver qué pasa en "Nine".
(Sigue sin spolier, aunque tampoco no hay nada que destripar).
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
Luhrman también pretende convertir cuatro vacas en una emocionante historia de aventuras, que cómo no, se queda en un subproducto disney, regalándonos momentos patéticos repletos de clichés (Kidman: "mira, mira, soy una relamida, pero no tengo más remedio que hacer de cow girl, y fíjate, acabo siendo la cow queen"), y esa escena de la estampida que si el chaval llega a llamarse Simba, Luhrman acaba denunciado por plagio. Lo peor de esto es que no son los 15 risibles (anda mira, es verdad que nos hizo reir Luhrman) primeros minutos, sino que la historietilla esta se lleva más de la mitad de la película y resulta un muermo.
La parte más entretenidilla de la película llega conforme empieza a terminar la película (y salen los créditos finales) y meten la historia impuesta del ataque japonés. Y digo impuesta pues la película hasta lo de las vacas ya era una película (aunque un rollo) y le meten el rollo de la guerra para que la tragedia no sólo resulte a partir de coces y pisotones bovinas. Entonces, más pretensión pues no está para más que para crear una leve tensión en la dilema interior del espectador por cual la palma; y lo de los niños es para elevar la emoción del asunto y buscar la lágrima fácil. Por tanto, es aquí donde la vacuidad que nos prometían sus tráilers alcanza su mayor esplendor.
En lo referido a la parte técnica: notable. Algo que sí le sale bien a este hombre en sus películas. Y es de notable por la banda sonora, bastante convencional y aburrida.
Ahora, otra cosa es la perra que le ha entrado al Luhrman con "El mago de Oz" y el "Somewhere over the Rainbow", pero que en cierto modo, no desentona tanto: el mensaje de la película va muy bien con "Australia": Como en casa en ningún sitio, qué razón, sobretodo si ese sitio es una sala de proyección de "Australia".
La parte más entretenidilla de la película llega conforme empieza a terminar la película (y salen los créditos finales) y meten la historia impuesta del ataque japonés. Y digo impuesta pues la película hasta lo de las vacas ya era una película (aunque un rollo) y le meten el rollo de la guerra para que la tragedia no sólo resulte a partir de coces y pisotones bovinas. Entonces, más pretensión pues no está para más que para crear una leve tensión en la dilema interior del espectador por cual la palma; y lo de los niños es para elevar la emoción del asunto y buscar la lágrima fácil. Por tanto, es aquí donde la vacuidad que nos prometían sus tráilers alcanza su mayor esplendor.
En lo referido a la parte técnica: notable. Algo que sí le sale bien a este hombre en sus películas. Y es de notable por la banda sonora, bastante convencional y aburrida.
Ahora, otra cosa es la perra que le ha entrado al Luhrman con "El mago de Oz" y el "Somewhere over the Rainbow", pero que en cierto modo, no desentona tanto: el mensaje de la película va muy bien con "Australia": Como en casa en ningún sitio, qué razón, sobretodo si ese sitio es una sala de proyección de "Australia".