Llega IRON MAN 3 a irrumpir las carteleras mundiales haciéndose de una millonada rumbo a superar los 1.000 millones de dólares o incluso alcanzar a THE AVENGERS.
Independientemente de esto, la película es una sobrecarga de acción ruidosa, efectos de primera línea y una evolución constante de sus personajes. Tony Stark interpretado por el genial Robert Dawney Jr. es de lo mejor y no se repite a sí mismo. También el personaje de Pepper hace algo más que colocarse una máscara del hombre de acero.
Una escena absurda pero emocionante sin duda: la caída de los 13 pasajeros del One Force y el superhéroe al rescate. El clímax es espectacular: una variable colección de trajes robóticos creando caos y acabando con los villanos. Para resaltar tambien al Iron Patriot.
La edición es frenética a pesar de que la narración hace saltos confusos en la continuidad.
Creíble dentro del contexto en que se desarrolla pasando por alto sus incongruencias.
Una saga sólida y sobre todo muy divertida.