“Cuando hay tormenta los árboles fuertes se rompen; pero las palmeras, que son menos fuertes, resisten porque suelen doblarse, que no es lo mismo que doblegarse”.

Esta es, sin duda, la frase que define la película y a nuestro joven protagonista.

'Intemperie' me deja también la siguiente reflexión, y es que existe un cambio de perspectiva de cuando somos niños a cuando somos adultos. El ser humano, desde niño, aprende a huir del dolor para evitar el miedo. Sin embargo, en su proceso madurativo, aprende a enfrentar el miedo para acabar con el dolor.

En esta travesía, un camino de experiencias muy duras van moldeando la personalidad del niño, que encuentra en el pastor a su fiel aliado. Y no solo eso; encuentra un maestro de vida, que le enseñará cosas relacionadas con el perdón, la lealtad y el valor.

Buena película y gran actuación del joven Jaime López.