En varias ocasiones de la película el protagonista habla de su "novia", lo muestran llamándola, y siempre respondiendo un contestador. Hacia el final de la película va a encontrarse con ella, con la excusa de devolverle dinero.
Es allí cuando el encuentro de él (drogado, sucio, ínfimo) y ella (alta, reluciente, bella) muestra el problema de dos mundos que no se entienden. Él le da un monto de la plata que le debía, ella lo felicita sarcásticamente, y después le echa en cara que no está para esas cosas, que tiene una vida, y sin más, se marcha.

Y eso es, a mi criterio, lo que Spun quiere mostrar, un mundo, en principio privilegiado, que no comprende y no quiere adentrarse en el otro, diezmado por debilidades, y posiblemente exiliado del primero.

La trama muestra a fondo el mundo under de la droga, y luego lo enfrenta directamente con el "limpio", el "común".

Todo el desenlace de la película nos da parámetros de esto, lo vi varias veces, y nunca deja de emocionarme. A mí esta película me sienta muy bien, van 10 por eso.