Tenía muchas ganas de ver esta película ya que pensaba que iba a ser una divertida comedia, con la que uno no iba a parar de reír estilo "Resacón en Las Vegas". Pero al final el resultado no es lo que yo esperaba, y sinceramente ha sido en cierto modo una tremenda decepción.
Creo que el principal error radica en el ritmo. Yo creo que una comedia no debe tener un ritmo vertiginoso, pero sí uno que no sea lento, ya que al final los gags y las escenas no consiguen funcionar con la misma efectividad. Y en este caso "La boda de mi mejor amiga" no cuenta con un ritmo correcto.
Paul Feig no consigue llevar a buen puerto una historia que cuenta con una trama buena, pero solo en el papel; ya que al ponerla en práctica no funciona. Así que uno se encuentra con un historia que dura más de dos horas, que no consigue mantener la atención en casi nada. La atención decae poco a poco, hasta llegar a un punto que es imposible de levantar; salvo muy pocas escenas puntuales que funcionan bien.
No sé muy bien porque este film tiene unas críticas tan buenas, ya que no consiguió convencerme en prácticamente nada. Una pena, porque la verdad es que esperaba muchísimo más, pero la historia decae minuto a minuto hasta un punto totalmente estrepitoso.
La verdad es que las actrices tampoco realizan un trabajo soberbio. No hacen una actuación mala, pero tampoco es brillante. Yo creo que no es debido a su talento, sino a que la historia no consigue hace despegar esas interpretaciones. La lentitud en el desarrollo, y un guión que no saca toda la esencia cómica que conlleva la trama, son factores determinantes para que las actuaciones no luzcan como debieran.
En fin, es una película de la que se espera muchísimo más. Un film que no resulta tan cómico como uno se imagina. Una tremenda decepción de la que no se salva prácticamente nada salvo unas pocas escenas muy puntuales, que lógicamente no consiguen salvar una trama que muere prácticamente nada más empezar la película.