"La Plaga" funciona como film B o Z si se quiere con sano cachondeo y salvando casi siempre la sensación de estar viendo una memez absoluta. Increible Michael Rooker (qué lejos quedan los tiempos de Henry) con más maquillaje y deformado que nunca. La trama tal vez es lo de menos, en este caso babosas espaciales dispuestas, cómo no, a merendarse a todo ser terrestre. A pesar del humor absurdo y de su apreciable ingenuidad no hay que olvidar que tiene grandes dósis de gore con referencias más que perceptibles a la Troma y a George Romero. Tiene aciertos curiosos dentro de su descacharrante historia, es previsible en tanto y cuanto a su desenlace y en líneas generales se ve con entretenimiento si bien no se le puede pedir demasiado. Es cine de segunda división y va de eso, no engaña.