Supuestamente basada en un hecho real, se nos presenta una película de fenómenos paranormales al más puro estilo ¨Poltergeist¨, pero con un trasfondo más sexual.

Una joven madre soltera es víctima de contínuos ataques y violaciones por una fuerza sobrenatural que parece haberla tomado con ella. Animada por una amiga, acaba acudiendo a un psicólogo, el cual en todo momento considera que todo lo que le pasa son problemas psicológicos de índole sexual.

La película es interesante, bastante interesante, por la manera en que está contada, seria y bastante dura, y cuenta con muy buenos efectos especiales que ayudan a darle realismo a la trama.

La parte que no me ha gustado, lo de siempre, en este tipo de películas: el nivel de incredulidad de los médicos de turno (en otros casos, policías), que vale, que intentan explicar de manera psicológica lo sucedido, pero eso se puede hasta cierto punto... porque llega un momento en que incluso su amiga ve que hay algo más, y su marido, y los estudiantes de parapsicología... ¿por qué no hablan, no explican lo sucedido, enseñan pruebas? Es bastante absurdo.

En fin, una película que creía que iba a ser menos interesante, y que me ha enganchado bastante durante toda su duración.