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China China · Desierto de Taklamakán
Voto de Último Materialista:
2
Romance. Drama Céline (Julie Delpy), una estudiante francesa, y Jesse (Ethan Hawke), un joven estadounidense que viaja por Europa tras ser abandonado por su novia, se conocen en un tren con destino a París. Cuando llegan a Viena, Jesse debe bajar porque al día siguiente regresa a su país, pero logra convencer a Céline para que pase la noche con él en la ciudad. En el curso de esa noche, se conocen a fondo, discuten sobre diversas cuestiones como la ... [+]
4 de abril de 2022
3 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
Gilipollez noventera de estilo y forma New Age concebida para satisfascer las pretensiones lúdico libidinales explotadas tras la caída del Telón de Acero. Gilipollez pseudotrascendental enfrascada en un farragoso dilema dialógico sin solución de continuidad en razón de su oquedad infumable.
Tontería resultante de las solciademocracias ("democracia" como lugar común o cliché, dada su falsa conciencia totalmente acrítica) posmodernas que tenemos que aguantar. Ideología light de fácil absorción por la clientela acrítica con el fin de persisitir en su falsa conciencia negadora de las veraderas estructuras que componen la realidad realmente existente.

Filme chapucero poéticamente cuasi nulo, cuya estética kitsch responde al intento ideológico justificador de la pseudo-filosofía mainstream realmente existente.
Dos posmodernos noventeros charlando de banalidades que oscilan entre los lugares comunes y la retórica farragosa.
Ni el paisaje, ni el ambiente, ni la urbanística ni la arquitectónica, ni la Historia ni la historia, ni la Filosofía ni la Poética tienen cabida en este bodrio noventero, monopolizado por un exceso de diálogo -encima pueril y chabacano incapaz de superar a los propios personajes, a su propia idiosincrasia- y por la ausencia de complejidad arquitectónica profunda.

Linklater, otro sofista más -con perdón de los ora maestros ora charlatanes de la Antigua Grecia- nos invade con sus cutres pretensiones propias de un pijo noventero -que pretende en su bohemia vida redimirse antropológicamente- y opuestamente halladas a las pretensiones de un maestro culto y mesurado, incapaz, entre otras cuestiones, de aguantar esa infumable estética artificial.

Chapuza de la que hay que huir o dar cuentas de su toxicidad espiritual y material.

2 o 1.
Último Materialista
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