De una película de terror espero poco actualmente: un guion mínimamente coherente y poco más. Pero cuando se trata de los Warren, hay cierto nivel establecido por sus dos antecesoras que considero que se debe cumplir. Así que, o estás al nivel o no.

Es incomprensible como Warner contando con David F. Sandberg, o incluso Gary Dauberman, se decanta por el (hasta ahora) peor director del Warrenverso. Y lo siento, pero esta película como cinta de terror tiene un pase, o incluso si no fuera por el titulo de 'Expediente Warren' podría tener perfectamente un 6 de nota por mi parte. Pero con esta saga hay unos mínimos que cumplir, y solo cumple el guion y las actuaciones (fantástica Vera Farmiga, que en esta entrega se come a Patrick Wilson).

La ausencia de Wan se nota desde el minuto 1. El nuevo director no es capaz de meter la indescriptible sensación de desasosiego que tan bien había logrado plasmar el malayo en las antecesoras. Esto, unido a que la película no resulta tan entretenida, que no da miedo (en efecto, ni el prólogo se acerca de casualidad al nivel de las anteriores) y que aquí falta un antagonista poderoso...Hace que pierda muchos enteros.

La fotografía cumple de buena manera, el guion es competente (aunque se traba en algunos tramos) y las actuaciones oscilan entre buenas (Farmiga domina el personaje) y correcta (todos los secundarios, a excepción de John Noble, que le faltan minutos para tan sólido trabajo). Por otro lado, la banda sonora sobrecogedora brilla por su ausencia. Entiendo que se ha querido apostar más por el thriller para diferenciarse, cosa que agradezco (y razón de por qué no está suspensa con 4), pero realmente se siente más está película como un spin-off de la franquicia y no una secuela. Una oportunidad pérdida.

5/10