Aunque no tengan nada que ver, con esta película me pasó algo parecido a 'Las brujas de Zugarramurdi'. Esperas que sea una comedia española buena llena de chistes y con un ritmo que lo último que harías es quedarte dormido. Pues no fue eso lo que me pasó. Alquilé esta película el pasado martes, con buenas expectativas habiendo visto que era la cinta más nominada a los Goya. El arranque es prometedor. Pero a la media hora, la película va tomando un tono más Isabel Coixet que te deja confuso y te hace plantearte qué quiere decir el director. En absoluto es mala, pero, ¿qué queréis que os diga? Me esperaba más. O es comedia o es drama. Y si están mezcladas, que sea bastante más regular.
Entre las interpretaciones, sin duda la mejor para mí es la de Roberto Álamo, con un personaje nada fácil. También me ha sorprendido bastante Patrick Criado, el Nuño de 'Águila roja' que hace un personaje con el que es muy fácil identificarse. Antonio de la Torre, Quim Gutiérrez y Verónica Echegui están bien, pero tampoco aportan nada nuevo, la verdad.
Pues eso, yo me esperaba más, pero no me ha dejado mal sabor de boca. Sean mejores o peores, a mí me gustan las historias de Sánchez Arévalo y cómo las cuenta.