Felicidades para ese director ruso de apellido impronunciable: me ha entretenido y sorprendido a partes iguales. El cásting tampoco está nada mal... y el argumento, tiene su originalidad y su puntito de innovador. Son de esas películas dignas de ver en pantalla grande y con una bolsa gigante de palomitas. Los personajes desarrollan lo justito de interés para mantenernos la curiosidad y la Jolie, como siempre, la nota sensual de la función (por un beso de la flaca yo no sé lo que daría...perdón, de la Jolie...). McAvoy acabo de verlo de prota en la serie secuela de Dune, y la verdad apunta buenas maneras, es de lo poco que tiene algo de vida en una serie llena de sosos y rostro-palos. Habrá que seguir la evolución de este chico, igual que la de este director ruso que ha dado un salto de altura al Hollywood posmatrix. Recomendada y recomendable para los que tengan mente juvenil y ganas de diversión sin exigencias de verosimilitud... el resto... abstenerse.