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España España · Córdoba
Voto de Talía666:
3
Romance. Comedia Inglaterra, finales del siglo XIX. El doctor Joseph Mortimer Granville inventó el primer consolador eléctrico para tratar lo que se conocía como histeria femenina, cuyos síntomas incluían insomnio, retención de fluidos, pesadez abdominal, espasmos musculares, irritabilidad o pérdida de apetito. (FILMAFFINITY)
19 de mayo de 2013
16 de 25 usuarios han encontrado esta crítica útil
"Qué es la histeria" Me preguntas mientras clavas en mi pupila tu pupila azul. Qué es la histeria. Y tú me lo preguntas... Pues la histeria es esa cosa que, según la tesis desarrollada por Tanya Wexler en la película, nos pasa a las mujeres cuando estamos mal folladas. Y como la acción se sitúa en la Inglaterra victoriana, época en la que se supone que muy pocas mujeres estaban bien folladas, la histeria campaba a sus anchas por la alta sociedad cual epidemia de peligrosas proporciones.

La verdad es que el tema daba juego. Y si a eso le añadimos la invención del vibrador como herramienta curativa contra la temida histeria, podía haber dado mucho de sí. Podría si no fuera porque el guión es muy muy flojito y los chistes facilones y tontunos. Y la consulta del doctor Magic Fingers tiene su gracia los primeros cinco minutos, pero luego la cosa consiste en repetir paroxismos una y otra vez. Uyssss, tres paroxismos en cinco minutos, cuatro paroxismos seguidos... En fin, como sabe perfectamente cualquiera que haya experimentado un multiorgasmo, el primero se disfruta, el segundo bueeeeno, el tercero ya resulta cansino, y a partir del cuarto... es un puto coñazo. A ver si esto se acaba ya de una vez, hosssstia.

Lo mejor Maggie Gyllenhaal, la sufragista convencida de que la histeria es un cuento chino inventado para explicar todo lo que los hombres son incapaces de entender de las mujeres. Gyllenhaal, la inolvidable protagonista de "Secretary", como de costumbre llena la pantalla y literalmente engulle todo lo demás. Y teniendo en cuenta que su oponente, Hugh Dancy, tiene casi tanto carisma como un poste de teléfono, la verdad es que aquí no tiene mucho que engullir. Sólo es de agradecer que Wexler no haya puesto a su personaje a paroxismarse. Hubiera sido insoportable.
Talía666
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