Sublime interpretación del tristemente fallecido James Caan, ejerciendo toda la historia de un magnífico manual de actuación.
Una película natural de diálogos ligeros con una inteligencia arrogante y un personaje que ha marcado pautas por su manera de manejar el tiempo a la hora de afrontar circunstancias adversas.
La intención de un hombre por ser honrado opaca con sus malas decisiones.
Michael Mann acentuó su pulso al género en este elegante, vibrante y estiloso relato totalmente atemporal.