Estamos ante una película que hace historia gracias a un atrevido rodaje basado un único plano secuencia. Pero lo que la Victoria nos ofrece es mucho más que un rodaje singular.
Lo que se nos presenta es, como reza el título, una auténtica montaña rusa. El inicio se extiende en el tiempo y, a priori, no parece presagiar "nada del otro mundo". Por no incurrir aquí en spoliers simplemente diré que gracias a este, considero que todo lo que vendrá después es realmente creíble (más abajo detallo este aspecto). Posteriormente, la trama dará un giro y, a continuación un auténtico carrusel de adrenalina y acción, que nos llevará finalmente de nuevo a la calma.
Me gustaría destacar el buen papel que los protagonistas realizan. Es muy meritorio por su parte rodar 140 minutos del "tirón". Mención especial para Laia Costa quien a lo largo de toda la película se muestra muy solvente, pero es en el tramo final cuando nos ofrece una actuación magistral.
El trabajo de cámara es realmente bueno, hay que destacar que se acompañará durante toda la película a la protagonista, lo que nos permite vivir una aventura en primera persona y en tiempo real.
En definitiva se trata, bajo mi punto de vista, de una gran película que cuenta una historia peculiar de una forma muy peculiar. Una lástima que su distribución en España haya sido tan limitada.