Una película que logra apoderarse de los sentimientos y sensibilidad del espectador, ya que en todo su trayecto fusiona la subsistencia junto con el vínculo afectivo de una hermandad, que sin lugar a duda estremece e impacta con su contenido.

Nos demuestra que tan poderoso puede llegar a ser el amor para obtener valentía, y  someterse a riesgos con tal de buscar una ayuda, por otro la simbología del filme es clave, ya que nos direcciona a la representación de las luciérnagas junto con la tumba, donde la esperanza y los sueños se ven enterrados.

Sueños que terminan acabando por un conflicto nefasto.