La peli es un rompecabezas que se va completando hasta conseguir al final una auténtica obra de arte. Y para disfrutarla más, puedes verla una segunda vez con otra perspectiva para comprenderla mejor. Trama impecable, intriga inteligente, estética trabajada en el frío y realista Detroit que va ligada a su economía de recursos, muy buen montaje, excelentes actuaciones y una idea de fondo a la que se va dando vueltas y más vueltas hasta llegar a la cima, convierten a esta peli en una pequeña obra maestra. El agente Nick Tellis, movido por una necesidad personal, busca la verdad que contiene el teniente Oak: ¿cuánta verdad será capaz de soportar? ¿Por qué hacen lo que hacen? ¿Y para qué? ¿Va de procedimientos policiales o sobre el bien y el mal? ¿Dónde está el fallo de todo esto? Y la ambigüedad envuelve las situaciones: ¿son los buenos tan buenos, y los malos tan malos? La fatalidad los arrastra a todos encadenados como un karma. Absolutamente recomendable.