Señoras y señores con ustedes aquí tenemos otra franquicia que fue un éxito en el pasado destruida en el presente por ideologías nefastas tal como sucedió con Star Wars o como sucedió con Terminator por citar algunos otros ejemplos.

No se que a quien se le ocurrió que podría haber sido una buena idea realizar una quinta película luego de una cuarta en donde claramente ya el personaje de Harrison Ford estaba gastado. Hay veces que hay que dejar descansar en paz a los personajes y tratar de crear algo nuevo y entretenido.

Pero el problema es que aquí se busca solamente bajar línea política feminista empoderando a Phoebe Waller-Bridge mientras que se rebaja completamente al personaje de Harrison Ford. Es algo que viene siendo muy común en el cine actual y que realmente no vale la pena consumir de ninguna manera.