Empecé a verla y hacia la mitad me di cuenta de que ya la había visto. Malo. Se ve que no me impresionó.
Luego me fui acordando que la vi y no hice la crítica porque el cine de Dolan me parece muy falso, insistente en los mismos temas y con unos trucos que esperas y efectivamente se dan.
El arranque de la carta puede pasar. Pero que por las cartas se pueda contar tales cosas del tal Donovan no es para nada creíble. Y luego es una trama muy manida. Lo del artista atormentado porque si se descubre su secreto, lo arruina.
Sería antes, pero ahora es todo lo contrario, como lo demuestra el mismo Dolan, y tantos otros, con sus carreras.
Como no hay emoción real, los personajes parecen artificiales, como el caso de la gran Susan Sarandon que aquí da pena verla. Y lo de Kathy Bates simple relleno.
La relación entre el niño Rupert y su madre es artificial y la pobre Natalie Portman, a pesar del empeño que pone, fracasa.
Me entero por aquí que la película duraba casi cuatro horas. Menos mal que la dejó en la mitad; si no, qué tormento..