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Voto de VALDEMAR:
19.233
Thriller
Simon (James McAvoy), un empleado de una casa de subastas, se asocia con una banda criminal para robar una valiosa obra de arte. Pero, tras recibir un golpe en la cabeza durante el atraco, descubre, al despertarse, que no recuerda dónde ha escondido el cuadro. Cuando ni las amenazas ni la tortura física logran arrancarle respuesta alguna, el líder de la banda (Vincent Cassel) contrata a una hipnoterapeuta (Rosario Dawson) para que le ayude a recordar. (FILMAFFINITY) [+]
7 de agosto de 2014
8 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
Imagina que tienes la encimera hecha un asco, como en los anuncios de productos de limpieza.
Imagina que vas a la tienda y adquieres una bayeta super-absorbente.
Imagina que eliges esa bayeta y no otra cualquiera porque trae un envoltorio precioso y muy molón.
Imagina que empiezas a limpiar con ella y la bayeta es la caña, te encanta, de manera que disfrutas de lo lindo limpiando tu encimera.
Imagina que quieres aclararle el jabón a tu estupenda bayeta, así que la metes bajo el grifo y la retuerces, y la retuerces, y sigue llena de jabón, y la aclaras de nuevo y la retuerces y la retuerces y sigue hecha un pingo, y la vuelves a enjuagar, y nada, que no hay quien aclare eso, y la remojas de nuevo y la retuerces y la retuerces, y la retuerces tanto que te vuelves majareta, y la retuerces, y la retuerces, y la retuerces.
Imagina que la retuerces, y la retuerces… y al final la tiras al cubo de la basura cagándote en el fabricante.
Ahora, imagina una peli de Danny Boyle.
Imagina que vas a la tienda y adquieres una bayeta super-absorbente.
Imagina que eliges esa bayeta y no otra cualquiera porque trae un envoltorio precioso y muy molón.
Imagina que empiezas a limpiar con ella y la bayeta es la caña, te encanta, de manera que disfrutas de lo lindo limpiando tu encimera.
Imagina que quieres aclararle el jabón a tu estupenda bayeta, así que la metes bajo el grifo y la retuerces, y la retuerces, y sigue llena de jabón, y la aclaras de nuevo y la retuerces y la retuerces y sigue hecha un pingo, y la vuelves a enjuagar, y nada, que no hay quien aclare eso, y la remojas de nuevo y la retuerces y la retuerces, y la retuerces tanto que te vuelves majareta, y la retuerces, y la retuerces, y la retuerces.
Imagina que la retuerces, y la retuerces… y al final la tiras al cubo de la basura cagándote en el fabricante.
Ahora, imagina una peli de Danny Boyle.
