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España España · Oviedo
Voto de babayu:
5
Serie de TV. Drama Miniserie de TV (2 episodios). Málaga, año 1959. Pepi, una niña de 9 años, de familia muy humilde, recibe una oferta para trasladarse a vivir a Madrid y convertirse después de una formación intensiva, en una estrella del cine infantil. En la capital, descubre un mundo plagado de interesantes retos: la ciudad, una casa moderna, costosos juguetes... Junto a todo ello planea de forma permanente la sombra de la decepción. Comienzan a ... [+]
25 de marzo de 2009
7 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
Estamos ante una de tantas historias basadas en la explotación infantil sin escrúpulos (como si la hubiera con ellos) de una persona en la que alguien descubrió que al talento se le puede ordeñar hasta exprimir la gallina de los huevos de oro, sin pararse en echar cuentas de que detrás hay una persona a la que se ha aniquilado.
Producida por Antena 3 Films, que lleva un par de años invirtiendo en el mundillo del cine (y cuyo mayor éxito es Vicky Cristina Barcelona), la trama es de hechuras irregulares, con una primera parte interesante, pero que se va desinflando hasta llegar a un final abrupto y desangelado. Está muy bien el inicio, cuando Manuel Goyanes descubre a esa niña, Pepi Flores, surgida desde la humildad de una corrala malagueña, y ahí empieza a afilar los dientes y a empezar el vislumbrar el símbolo del dólar; es tremendo cómo practicamente "secuestra" a esa pequeña de once años, a la que mete en su casa e intenta manejar a su antojo: desde Un Rayo de Luz, en 1960, la chica será sometida a unas jornadas de trabajo maratonianas, durante casi una década, explotando su imagen y su voz, procurando mantenerla separada de su familia, y forzando aparentemente su aspecto de niña angelical, cuando la adolescencia empieza a convertirla en una mujer despampanante. Como otros tantos ejemplos de ídolos del tardofranquismo, Marisol empieza a sufrir la voracidad implacable de esos que se han convertido en vampiros de su talento, convirtiéndose en una persona infeliz, en un ídolo de pies de barro, en alguien con una personalidad tan arrolladora como cohibida por unas obligaciones que nunca ha deseado.
Antonio el Bailarín será el principio del fin del mito, a raíz de un enamoramiento caprichoso e interesado, Pepi buscará huir de esa casa, de esa carrera, de esa notoriedad, y empezará un tour de force cuyo objetivo es llegar a convertirse en una mujer anónima. La segunda parte de la serie es bastante más floja: a pesar de que quizás sea lo más interesante, la evolución del personaje se queda en lo anecdótico, se pasa fugazmente por su matrimonio con Carlos Goyanes, y aún más rápido se ventila su amor con Antonio Gades, quien le abrirá las puertas a su sueño, que es que una desconocida Pepa Flores se imponga a una superfamosa Marisol.
Me gustó mucho la actuación de Ana Mena como la niña Pepi, y no tanto Elsa Pinilla y Teresa Hurtado de Ory interpretando a la protagonista en otras etapas de su vida.
babayu
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