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España España · SORIA
Voto de WATUSI:
8
Drama Film semiautobiográfico de la propia infancia y juventud de Spielberg. Ambientada a finales de la década de 1950 y principios de los años 60, un niño de Arizona llamado Sammy Fabelman, influido por su excéntrica madre, artista (Michelle Williams), y su pragmático padre, ingeniero informático (Paul Dano), descubre un secreto familiar devastador y explora cómo el poder de las películas puede ayudarlo a contar historias y a forjar su propia identidad.  [+]
26 de enero de 2023
8 de 15 usuarios han encontrado esta crítica útil
La infancia, ese periodo de nuestra existencia que nos marca para toda la vida y que como esponjas, nos hace absorber todo lo que nos rodea.
Recuerdo la primera vez que asistí a un cine y el disfrute que experimenté. El film fue HERBIE, UN VOLANTE LOCO, una comedia familiar muy acorde con mi edad. Pero poco después y con una edad no adecuada, mi madre me llevó a visionar TIBURÓN, del director que nos ocupa. Al igual que SPIELBERG en su primera visita a un cine, durante todo el metraje mi boca estuvo abierta, la gente chillaba, yo no, no pestañeaba, no me asustaba (ya me había puesto mi madre en canción de que nada era verdad), simplemente disfrutaba, aprendía y comenzaba un largo recorrido por el maravilloso mundo del cine que aun continua y que tanto me aporta.

SPILBERG hace un auto retrato de su trayectoria desde su primer contacto con el cine (a través de la ficticia familia FABELMAN), visionando EL MAYOR ESPECTÁCULO DEL MUNDO y las consecuencias que le han llevado a ser uno de los mejores cineastas de la historia.
El director hace muestra de su experiencia de una forma tierna y amable, con planos descriptivos sin estridencias, mostrando sin necesitar de diálogos y haciendo gala de su experiencia y sus excelsas dotes que le han convertido en un director referente de los últimos 50 años. Queda patente el don de hacer ver lo que siente y que los demás lo capten, virtud intrínseca que le acompaña desde sus primeras grabaciones infantiles.

LOS FABELMAS es un retrato agradable de los sentimientos del director en su apertura al mundo cinematográfico, CINE DENTRO DEL CINE en estado puro. Una incursión de una mente distinta y una lucha contra uno mismo y contra todos, para regalarnos las experiencias de una mente privilegiada. Una muestra de arte, recreándose en sus virtudes para regalarnos un gran film. Como punto negativo, únicamente indicar que en algunas partes del metraje, el director se olvida mínimamente del lado sentimental, cosa que en muchas ocasiones ha explotado con maestría, para centrarse en el lado técnico detrás de la cámara y poniendo en marcha la “regla de los tres tercios” en la que espléndidamente JONH FORD le adentró.

Otro punto a favor del film es una agradable banda sonora de manos del gran compositor JOHN WILLIAMS, el hombre record con más de 50 nominaciones a los OSCAR a sus espaldas. El piano siempre está presente en la mayoría de las secuencias.

Respecto a las interpretaciones, un meritorio MATEO ZORYAN como el pequeño SPIELBERG, que realiza un buen trabajo, GABRIEL LABELLE como el STEVEN adolescente, de manera correcta y el matrimonio FABELMAN, con MICHELLE WILLIAMS (madre) eclipsando al padre (PAUL DANO). MICHELLE cambia de sus, en muchas ocasiones, registros sexualizados para mostrarnos una madre distinta, con problemas psicológicos y que la actriz expresa a la perfección, con la pega de que en alguna secuencia resulta algo sobreactuada. Como explicaba con anterioridad, el papel del padre es complicado, no por lo que expresa, sino porque tiene mucha mayor fuerza el de su pareja y por ello es difícil destacarlo.
Mención aparte dos grandes actuaciones en pequeñas secuencias, pero dignas de mención, de los veteranos JUDD HIRSCH y DAVID LINCH (con curiosa petición en su contrato de siempre tener CHETOS a mano)
WATUSI
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