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Voto de Ferdydurke:
5
2017
5,7
22.515
Musical. Comedia
María y Susana son dos adolescentes rebeldes de 17 años que se encuentran en el campamento de verano cristiano "La brújula" en Segovia, al que van desde pequeñas. Ambas sienten pasión por el reggaeton y el electro-latino, pero las sorprendentes apariciones de Dios a María comenzarán a cambiar sus vidas... Adaptación cinematográfica del musical homónimo del año 2013, de gran éxito en España. (FILMAFFINITY)
27 de octubre de 2017
31 de 45 usuarios han encontrado esta crítica útil
Susana (o Rosana) Romero y María Casado. ¡Qué nombres tan bonitos! Qué rotundos, claros y sonoros. Qué nombres tan españoles. Y casi como de presentadoras o periodistas de televisión. De la primera. Una quizás rubia, la otra tal vez morena.
Dios era un hortera de bolera. Un cruel destrozacanciones. Un mamarracho de peluquín y botas camperas. Un petimetre de casino, bingo, noche de fiesta y apto para cualquier cabaretera.
La Religión y sus continuas mutaciones permiten su vida siempre nueva. Transforma a sus feligresas en cantantes, amantes y personas traviesas.
¿Musical, ensayo sobre la vida irreal, "Criaturas celestiales" donde se confunden el amor, el sexo, las primeras turbaciones, sueños imposibles y otros calores? ¿Versión pop de la anunciación de la gracia? ¿El mundo entero, el universo con todas sus galaxias es un nefando Karaoke? ¿Vivimos ya todos en una horrible naturaleza muerta e inmensa discoteca, asolada, llena tan felizmente de macarras, chonis, perroflautas y terroristas, además de monjas, camellas, bolleras y gañanes con tirolina, juntos todos en un aquelarre de perversa música electrolatina? ¿Es la gran depravación, la definitiva descojonación, la última metamorfosis o el cielo soñado de un Dios con anhelo de brillantina y el alma de purpurina? ¿Moriremos apretujados, gozosos, respirando sano y bailando al son horripilante de una maravilla imaginada por unas adolescentes muy descocadas y bailarinas?
Dios era un hortera de bolera. Un cruel destrozacanciones. Un mamarracho de peluquín y botas camperas. Un petimetre de casino, bingo, noche de fiesta y apto para cualquier cabaretera.
La Religión y sus continuas mutaciones permiten su vida siempre nueva. Transforma a sus feligresas en cantantes, amantes y personas traviesas.
¿Musical, ensayo sobre la vida irreal, "Criaturas celestiales" donde se confunden el amor, el sexo, las primeras turbaciones, sueños imposibles y otros calores? ¿Versión pop de la anunciación de la gracia? ¿El mundo entero, el universo con todas sus galaxias es un nefando Karaoke? ¿Vivimos ya todos en una horrible naturaleza muerta e inmensa discoteca, asolada, llena tan felizmente de macarras, chonis, perroflautas y terroristas, además de monjas, camellas, bolleras y gañanes con tirolina, juntos todos en un aquelarre de perversa música electrolatina? ¿Es la gran depravación, la definitiva descojonación, la última metamorfosis o el cielo soñado de un Dios con anhelo de brillantina y el alma de purpurina? ¿Moriremos apretujados, gozosos, respirando sano y bailando al son horripilante de una maravilla imaginada por unas adolescentes muy descocadas y bailarinas?
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
Tiene su mérito. Consigue hacer de la nada un entretenimiento la mar de llevadero. Una enorme chorrada convertida en un pasatiempo más o menos ameno. Su insultante levedad y tonta frivolidad ofrecidas en simpática brevedad.
Y el final no está mal. Si se te van los pies, tú también tienes fe en lo que sí se ve.
P.D.: Las chicas están muy bien. Especialmente Anna Castillo. No tanto la, para mí, aunque estupenda, demasiado sobreactuada monja Milagros (la muy dotada comicastra Belén Cuesta).
Lo peor, la selección musical, qué duda cabe.
Y el final no está mal. Si se te van los pies, tú también tienes fe en lo que sí se ve.
P.D.: Las chicas están muy bien. Especialmente Anna Castillo. No tanto la, para mí, aunque estupenda, demasiado sobreactuada monja Milagros (la muy dotada comicastra Belén Cuesta).
Lo peor, la selección musical, qué duda cabe.