Media votos
4,3
Votos
2.805
Críticas
2.805
Listas
0
Recomendaciones
- Sus votaciones a categorías
- Contacto
-
Compartir su perfil
Voto de Ferdydurke:
3
6,8
5.170
Drama
Un matrimonio del norte de humilde condición suspira por tener un hijo, pero el destino les da una niña. Poco tiempo después, sin embargo, nace el ansiado varón. Un hecho terrible hará que madre e hija no se hablen durante quince años. (FILMAFFINITY)
25 de septiembre de 2021
2 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Píntate. Segundo apellido. Te doy mis ojos. La niña santa.
El mal por el mal. La primera parte queda invalidada, a pesar de sus muchas rimas (el bastón, el ruido del juguete que pisa el padre cada puta noche, el beso con pelo... ) y hallazgos, de su indudable talento audiovisual, por una premisa fantástica, maldita, de leyenda negra medieval, nada moderna, anacrónica, imposible,además absurda si la mezclas o casas con una narración detenida en el puro realismo psicológico de un presente convencional.
Ese mal o problema que origina tanto sufrimiento no proviene o emana de los personajes o situaciones que nos muestran, de la pura lógica de la historia y cómo esta evoluciona, es anterior, previo a todo, es un punto de partida viciado, dios justo antes de crear el mundo, sin ningún sentido, solo posible dentro de un cuento gótico totalmente metafórico, artificioso, barroco, no solo como fondo o excusa y adiós muy buenas. La unión de esos dos elementos bastante antagónicos, lo extraordinario fabulesco alegórico pesadillesco y lo cotidiano naturalista ordinario tétrico, depara un relato fascinante y extraño, morboso y fallido, curioso, desagradable, hermoso.
Pero es en la segunda parte cuando todo se va al garete, cae por el retrete, ya que además desaparece la causa primera, todo lo que aquí pasa es completamente arbitrario, caído del cielo, porque sí, fullero, tramposo, engañoso, no se sostiene, no es mínimamente verosímil, es grotesco, penoso y ridículo. Y me refiero muy especialmente al personaje, claro, del largo, el basurero guapo, el chistoso, ese energúmeno o fantoche de medio pelo. Todo en él (con) nada tiene que ver; botarate, engendro, estrambote, disparate. Como un meteorito, un rayo o un trueno que cae sobre la historia y la aplasta o destruye, parte por la mitad, espachurra definitivamente.
El mal por el mal. La primera parte queda invalidada, a pesar de sus muchas rimas (el bastón, el ruido del juguete que pisa el padre cada puta noche, el beso con pelo... ) y hallazgos, de su indudable talento audiovisual, por una premisa fantástica, maldita, de leyenda negra medieval, nada moderna, anacrónica, imposible,además absurda si la mezclas o casas con una narración detenida en el puro realismo psicológico de un presente convencional.
Ese mal o problema que origina tanto sufrimiento no proviene o emana de los personajes o situaciones que nos muestran, de la pura lógica de la historia y cómo esta evoluciona, es anterior, previo a todo, es un punto de partida viciado, dios justo antes de crear el mundo, sin ningún sentido, solo posible dentro de un cuento gótico totalmente metafórico, artificioso, barroco, no solo como fondo o excusa y adiós muy buenas. La unión de esos dos elementos bastante antagónicos, lo extraordinario fabulesco alegórico pesadillesco y lo cotidiano naturalista ordinario tétrico, depara un relato fascinante y extraño, morboso y fallido, curioso, desagradable, hermoso.
Pero es en la segunda parte cuando todo se va al garete, cae por el retrete, ya que además desaparece la causa primera, todo lo que aquí pasa es completamente arbitrario, caído del cielo, porque sí, fullero, tramposo, engañoso, no se sostiene, no es mínimamente verosímil, es grotesco, penoso y ridículo. Y me refiero muy especialmente al personaje, claro, del largo, el basurero guapo, el chistoso, ese energúmeno o fantoche de medio pelo. Todo en él (con) nada tiene que ver; botarate, engendro, estrambote, disparate. Como un meteorito, un rayo o un trueno que cae sobre la historia y la aplasta o destruye, parte por la mitad, espachurra definitivamente.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
spoiler:
El final poético es bello, pero ya es demasiado tarde, llegamos a este punto rendidos y vencidos, sin fuelle, con el alma rota, exhaustos de tanta tontería forzada, de tanto desencuentro fiero, fortuito, desgracia a espuertas.
Con el muy mal gusto postrero de ver aparecer a Tito hecho un vegetal, lo que faltaba ya en cuanto a truculencia gratuita y exageraciones chuscas, no había ninguna necesidad de insistir/mostrar esa inopinada acumulación de tragedias, casi nunca la hay.
Pues eso, grandes capacidades cinematográficas echadas a perder al mostrar un mundo vacío, pirotecnia huera, un truco con nada dentro, magia potagia oscura y escurrida, mucha forma, ahíta, nada de contenido, alicaído.
Alterna momentos de inquietud siniestra con otros casi de risa por lo estrambótico y algunos más de relleno en un transcurrir brillantemente tonto, aterradoramente vano.
O de cómo una pochola se convierte en un monstruo para volver a ser una mariposa que es atacada por un gusano y que al final vuela, vuelve, hija pródiga que nunca se fue y que ahora ya se queda de veras.
El cierre, la película es circular (¿esa última camisa no está hecha con los mismos colores que arrancó para hacer las alas de la mariposa?), redención, reconciliación, salvación, continuidad, esperanza, una pequeña luz surge de entre tanto escombro, un oasis en el tártaro desierto, un merecido descanso tras tanto oprobio, mucho agobio.
Mi mamá (no) me mima.
El ogro, el manso o calzonazos o inocente santo, la bruja mala, Cenicienta, el príncipe envenenado y la resurrección a través/posterior/por encima de una violación o de cómo transformar lo malo en bueno.
Con el muy mal gusto postrero de ver aparecer a Tito hecho un vegetal, lo que faltaba ya en cuanto a truculencia gratuita y exageraciones chuscas, no había ninguna necesidad de insistir/mostrar esa inopinada acumulación de tragedias, casi nunca la hay.
Pues eso, grandes capacidades cinematográficas echadas a perder al mostrar un mundo vacío, pirotecnia huera, un truco con nada dentro, magia potagia oscura y escurrida, mucha forma, ahíta, nada de contenido, alicaído.
Alterna momentos de inquietud siniestra con otros casi de risa por lo estrambótico y algunos más de relleno en un transcurrir brillantemente tonto, aterradoramente vano.
O de cómo una pochola se convierte en un monstruo para volver a ser una mariposa que es atacada por un gusano y que al final vuela, vuelve, hija pródiga que nunca se fue y que ahora ya se queda de veras.
El cierre, la película es circular (¿esa última camisa no está hecha con los mismos colores que arrancó para hacer las alas de la mariposa?), redención, reconciliación, salvación, continuidad, esperanza, una pequeña luz surge de entre tanto escombro, un oasis en el tártaro desierto, un merecido descanso tras tanto oprobio, mucho agobio.
Mi mamá (no) me mima.
El ogro, el manso o calzonazos o inocente santo, la bruja mala, Cenicienta, el príncipe envenenado y la resurrección a través/posterior/por encima de una violación o de cómo transformar lo malo en bueno.