La primera cinta de "Iron Man" me pareció un pasatiempo tan básico como satisfactorio... pero la segunda me resultó una caótica pesadilla (terriblemente hilvanada y exageradamente mema) de explosiones, villanos y chistecillos sin gracia alguna. La verdad es que el metraje de "Iron Man 2" me resultó tan molesto y desagradable que casi se me quitaron las ganas de ver esta tercera parte, sin embargo hice bien en darla una oportunidad.

En esta tercera entrega, Iron Man remonta el vuelo y corrige los errores de la segunda parte. El guión (sin ser tampoco una maravilla) está muchísimo mejor cohesionado que el de la 2ª, sabe concentrarse en una única trama aventurera clásica (de caída del héroe a los infiernos y ascensión de nuevo para triunfar) de manera bastante más coherente y menos disuelta; y no se desbarata en mil y un villanos y subtramas que acaban en el desorden, la incoherencia y (lo que es peor) en lo insultantemente superficial. Aquellos estorbos por fortuna ya no suceden aquí.

Tampoco es que estemos ante un libreto esmeradísimo que será recordado como obra maestra del cine superheróico (ni mucho menos). Su historia basada en los cómics no sorprende (y en muchos puntos es altamente previsible. ¿Cuantas veces hemos visto esta historieta en la que hay un "superplan malvado", un ataque al superhéroe, secuestros, rescates, etc?) y tampoco se estrujan los sesos en explicar alguna que otra incoherencia entre golpe y puñetazo, pero se disfruta si es se es fan del género (y eso a estas alturas es decir mucho). Su intriga es mínima, sí... pero logra ser suficiente para la animosa y desenfada distracción que pretende ser el producto. Tiene las dosis justas de curiosidad para captar un interés que no necesita nada más al ser llevado a escena con bastante habilidad.

"Iron Man 3" sigue la estela de "Los vengadores", y fusiona un relato básico (pero no tan bobo como cabría esperar) con espectacularidad épica. El metraje por lo general tiene un compás con garra y fuerza (aunque no evita alargarse sin sentido y de manera innecesaria en algunas escenas de acción... pero por otro lado también deja abundantes momentos de artificio realmente potentes. Digamos que al final el saldo es positivo), la mano de Black es flamante, los escenarios y los efectos son extraordinarios y asombrosos (se notan los millones), las fotografía está cuidada, los actores están todos de lo más adecuados (Paltrow cada vez se siente más en su salsa en un papel algo tópico pero que resulta de lo más simpaticón gracias a ella) destacando a un Robert Downey Jr. que rezuma carisma por todas partes con su despreocupado, sinvergüenza e irónico Tony Stark.

Pero todas estas virtudes no hubieran servido para nada si las gracietas y el desenfado del metraje no atinara en complicidad, y si su trama no hubiera sido capaz de generar algo de expectación. Pero "Iron Man 3" lo logra. Así que, aunque no aporte ningún calado, intimismo, angustia profunda o madurez al estilo de los personajes de Nolan, "Iron Man 3" se erige con mucha dignidad dentro de lo que son las cintas de la Marvel (donde todas tienen un estilo desenfadado, ligero, juvenil y humorístico).

No hay que pedir más de lo que da (que lo da).

Lo mejor: Robert Downey Jr. totalmente hecho al personaje con completa genialidad.
Lo peor: Algunas escenas de acción se alargan de manera innecesaria... y además estiran la acción con algunos momentos demasiado absurdos.