Es rara pero es buena y te deja, quizás, un poco ansioso porque llegue el final, ya que hacía el final cansa tanto asesinato de la buena madre Grace. La película es claramente inglesa, eso se muestra desde su epílogo tan curioso y divertido con una jovencita Grace y un pueblo muy de la campiña inglesa con tan sólo 57 habitantes (¡coño! como para querer vivir allí viendo como es la gente). Ya la participación de Rowan Atkinson y de Maggie Smith certifican el "made in England" del film. Si bien es una comedia negra algo suave y juega con los asesinatos como forma de hacer gracia queda un tanto aburrida, quizás uno esté demasiado acostumbrado con el cine americano y no paladea del todo este cine tan curioso. Es una buena película para ver como forma de pasar el rato sin demasiadas pretensiones y un buen film para empezar a hacer críticas. Una película buena, graciosa, pero algo tediosa que si bien te hace verla con agrado no aporta nada realmente importante en tu vida que no mejore una salida con amigos a "cervecear" o una cita con una chica medianamente agradable. Si bien, como todos sabemos, no hay persona en el mundo que vea sus propios errores y que no prefiera culpar a los demás antes que ver donde falla, seguramente el bueno de Niall Johnson acepte que, aunque su peli es de buena factura, tiene una buena fotografía y buenos actores es de esas películas que conforme las ves te olvidas de ellas.