En una comedia protagonizada por Seth Rogen y con tan explicito titulo, no suelo hacerme muchas ilusiones, (a las últimas producciones de este estajanovista actor, me remito), cuando me enfrento a su visionado, salvo si el que la firma es Kevin Smith, en cuyo caso se me disparan las expectativas y aspiro a ver un transgresor, inteligente y divertido film. Entretenida a duras penas película, que no llega a entusiasmar en ningún momento, por el contrario he llegado a sentir vergüenza ajena en alguna fases del film, debido al tono casposo de los diálogos y a los, en su mayoría pueriles gags, que más que de Kevin Smith, parecen obra de un guionista de Los Serrano pasado de acido.
Por lo único que recordare esta película es por ver de nuevo a la entrañable y añorada Traci Lords.