La verdad, es que es la primera película que veo del Allen de los 70 y ha sido increíble, supongo que si la hubiera visto en su contexto la hubiese otorgado una mejor puntuación aún. Me parece fantástica, un clásico que no ensombrece con el paso del tiempo, no se si incluso se podría decir que mejora como el buen vino. La interpretación del Allen más neurótico y sincero unida a una Diane Keaton que en ningún momento le deja escaparse en solitario y un elenco de secundarios sobre los que Woody sabe depositar la dosis exacta de unas dotes que no hacen sino engrandecer la actuación de los personajes principales.