Un potente drama (producido por Tom Cruise) de corte independiente en el que veremos lo que significa para dos policías buscar la verdad en medio del peligroso mundo de las drogas y cuyas vidas se verán inmersas en un oscuro caso que los llevará hasta límites impensados para ambos.

Lo primero que viene a la mente del espectador mientras observa este film dirigido por Joe Carnahan es que tiene algunos puntos en común con otra cinta que se estrenó poco tiempo antes, me refiero a "Training Day" de Antoine Fuqua. Y el único punto que tiene en común es el expuesto en el primer párrafo. Nada más.

Esta cinta va en otra dirección mucho más cruda en cuanto al tratamiento de la trama, es más explícito incluso desde la primera secuencia y se atreve a aportar un mayor realismo a toda la propuesta. Además en la producción se maneja un uso de recursos técnicos interesante, práctico y sobre todo se aprovecha al máximo el presupuesto "humilde" con que se cuenta (apenas 7,5 millones de dolares aproximadamente) y tomando en cuenta los nombres de los implicados eso es un punto a su favor.

En el reparto tenemos a dos nombres bastante conocidos como Ray Liotta (que también es productor ejecutivo) y Jason Patric, que cumplen de forma impecable en sus respectivos roles, especialmente el primero que se "desata" a ratos, y lo digo como un cumplido. De soporte se dejan ver Busta Rhymes, Lina Giornofelice, Chi McBride, Dan Leis y John Ortiz.

Excelente película, pero una advertencia porque tiene algunas escenas bastante fuertes.