Haz click aquí para copiar la URL
Voto de Luis Guillermo Cardona:
7
Fantástico. Comedia. Infantil Charlie Bucket (Freddie Highmore), un niño muy bueno de una familia muy pobre, gana un concurso para disfrutar de una visita de un día a la gigantesca fábrica de chocolate del excéntrico Willy Wonka (Johnny Depp) y su equipo de Oompa-Loompas. Cuatro niños más de diferentes partes del mundo lo acompañarán a través de un mundo fantástico y mágico lleno de diferentes sabores.
21 de agosto de 2009
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
De vez en cuando, a nuestra vida llegan personas que nos aleccionan de manera singular, dolorosa o extraña… pero, sin duda, necesaria. Cuando no se sabe ser humilde, y cuando se tiene por costumbre pensar que nosotros somos las víctimas y los demás nuestros verdugos, vemos éste acto puramente aleccionador como una injusticia de la vida y no como un mensaje que requeríamos urgentemente. Pero, lo creas o no, es un regalo, porque nada puede ser más grato -aunque duela y aunque nos deje una fea cicatriz- que aquello que nos ayuda a abrir los ojos y nos permite Ver.

Hay, al menos, cuatro clases de padres que resultan nocivos para sus hijos: Los Sobreprotectores, los Sumisos, los Tiranos y los Indiferentes. En, <<CHARLIE Y LA FÁBRICA DE CHOCOLATE>>, se hace justicia cuando, de la lección, se hace partícipe tanto al padre como al hijo, pues, los defectos de nuestros hijos, evidencian las falencias de nuestro proceso formativo.

Tim Burton, ese enfant terrible que se fascina con lo gótico y descubre la belleza en lo que otros ven con horror, se complace con este remake de un filme que protagonizara, Gene Wilder, en 1971. Pero, sorprendentemente, Ésta nueva versión resulta más racional y sensata –ignoro cual sea más ajustada al libro de, Roald Dahl– pues, la de Mel Stuart, era descarnadamente cruel y perversa.

Burton, incorpora personajes encantadores, como los abuelos de Charlie, verdadero ejemplo de ese envejecimiento sensato, ¡tan escaso en los últimos tiempos!, y a ellos, los contrasta con los pequeños desadaptados, fiel resultado de la incompetencia de sus padres en segunda generación.

Un largo paseo por las instalaciones de una mágica empresa de chocolates –con algunos momentos que quisiéramos editarlos–, servirá de ocasión para tentar a varios chicos a aflorar sus incontrolados instintos... y ésto motivará el necesario adoctrinamiento que, con malvada complacencia de parte de Willy Wonka, brota de los incidentes a los que él favorece, muy sutilmente.

<<CHARLIE Y LA FÁBRICA DE CHOCOLATE>>, contiene divertidas situaciones, buena música, algunas escenas eficazmente elaboradas... y, Johnny Depp, resulta muy acertado como el hombrecillo, Willy Wonka, al que le prohibieron tanto los dulces que terminó montando la empresa de chocolates más grande de toda la nación. A su obsesivo padre -el dentista Wilber Wonka-, lo interpreta, Christopher Lee, y es probable que, Tim Burton, lo haya elegido porque Lee ha sido, por laaaargo tiempo, un gran experto en colmillos.

Si usted tiene niños malcriados o es usted ese niño que se siente el ombligo del planeta, bien le vale que aprecie ésta película. Una buena sacudida mental de vez en cuando es conveniente.
Luis Guillermo Cardona
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow