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España España · almeria
Voto de TOM REGAN:
6
Cine negro. Intriga Philip Marlowe está prácticamente retirado de su vida como detective. Se ha casado y vive lujosamente dentro de la más selecta sociedad. La llamada de un amigo detective lo lleva a involucrarse en un nuevo caso en el que la pornografía es la tapadera de un asunto de mayor envergadura. (FILMAFFINITY)
12 de septiembre de 2022
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302/15(12/09/22) Con motivo de la reciente muerte de los neoyorkinos James Caan (06/006/2022), eterno Santino Corleone, y del director Bob Rafelson (23/07/2022), me he encontrado una película film donde los dos trabajaron juntos. Este telefilm impulsado por la productora de Sidney Pollack y estrenado en la HBO, una entretenidilla cinta que quiere ser un neo noir crepuscular, al retratar al icónico detective Philip Marlowe de mayor, e incluso casado. Detective reflejado en su cima en los films “Historia de un detective” (1944-Dmytryk), “El sueño eterno” (1946-Hawks), “La dama del lago” (1946- Montgomery), manteniendo los elementos, pero notándose todo cansado. La película está basada en la última novela e inconclusa “Poodle Springs” de Raymond Chandler, la octava novela de Marlowe, quedaron escritos cuatro capítulos y un esquema de la trama cuando el autor murió en 1959 a la edad de 70 años. No fue hasta 1989 que Poodle Springs se publicó en un libro encargado por los herederos de Chandler y completado por el escritor de crímenes Robert B. Parker, siendo el guión del dramaturgo Tom Stoppard (“Shakespeare enamorado”), quedándome una cinta con efluvios a cine negro, pero falto de punch para punzarte. Tiene los elementos del género y del personaje, millonarios arrogantes que se creen el ombligo del mundo, hijas caprichosas y ociosas de estos, chantajes porno, matones caricaturescos, gente de honor, mucha amoralidad, y por supuesto una trama laberíntica complicada de seguir donde los nombres se suceden en modo tsunami, donde hay que estar muy atento para poder seguir los pasos del detective privado (en este caso lo enrevesado y denso de la trama se rebela cuando se desmadeja muy simple). Tenemos algunos giros interesantillos, adentrándonos en el patio trasero de los millonarios, en sus miserias. Aunque su *final me ha resultado en sus diferentes fases harto mejorable.

Los Ángeles, California, noviembre de 1963: El investigador privado Philip Marlowe (James Caan) acaba de regresar de un viaje a México, donde conoció y se casó con Laura Parker (Dina Meyer), una hija millonaria que también vive en Los Ángeles. Hoy, cuando ella se presenta en su oficina para hacer algunos arreglos para su primera reunión con su padre, PJ Parker (Joe Don Baker), Marlowe recibe una llamada de un investigador privado llamado Paul Crouse (Joe Davis), quien quiere reunirse con él porque necesita su apoyo en el caso de vigilancia personal. Crouse llega justo a tiempo para decirle que está llamando al puerto de San Pedro desde el teléfono de su automóvil cuando suenan dos disparos y la línea se corta. Marlowe llama al teniente de policía. Arnie Burns (Tom Bower) personalmente y le dice lo que sabe antes de proceder al Muelle 60 en San Pedro. De hecho, el descapotable Thunderbird rojo descrito está allí y Paul Crouse yace en el asiento del conductor con una bala en la cabeza. Marlowe es el primero en llegar a la escena, pero cuando los policías descubren que Crouse fue asesinado de un tiro en lugar de dos, y que tampoco usó el teléfono de su auto esta mañana, inmediatamente identifican al sorprendido detective como sospechoso.

Tenemos entre lo mejor al protagonista que da vida un notable James Caan, demostrando cinismo, mordacidad, flema, debilidades, pero que juega en contra su poca química con la actriz que da vida a su esposa, Dina Meyer, el actor tiene 58 años y aparenta diez más, mientras ella tenía la mitad, 29, y esto lo peor es que se nota mucho, no te crees esa pareja, da grima verlos acostados con el pecho el todo lleno de vello rizado cano con ella sobre él, casi puedes verla a ella al decir corten escupiendo al suelo. El director intenta que veamos al detective fuera de su hábitat, siendo mantenido por una bella heredera que lo amanceba en una residencia de lujo, verlos acaramelados, pero este no es nuestro Marlowe, verlo en este nuevo mundo donde vemos que se estrena una más de la saga de James Bond “Desde Rusia con amor”, lo vemos recoger colillas del suelo, lo vemos con camisas floridas hawaianas, esto me es un tanto grimante, donde gana el actor es ejerciendo de detective, en los interrogatorios, en cómo se desenvuelve con la poli, en como manipula a los que interroga, en su dureza, en su integridad personal.

También son meritorias las actuaciones secundarias de Brian Cox, demostrando su enorme carisma en solo dos escenas, arrollando con su personalidad marcada; pero es que Joe Don Baker en solo una pequeña secuencia desborda la pantalla con su sibilina villanía, sensacional; otro que ha demostrado gran carácter es Sam Vlahos, tipo de esos con los que Philip Marlowe se identifica de igual a igual, muy bueno; Asimismo posee un ritmo fluido, sin ser rápido no llega a haber tedio.

Rafelson también pretende reinventar el cine negro en la deslumbrante cinematografía de Stuart Dryburgh (“El Piano”), en la luminosidad de la obra, alejado del expresionismo característico, mostrando un sol resplandeciente, que reluce sobre colores pastel.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
TOM REGAN
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