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Voto de TOM REGAN:
8
7,5
770
Drama. Thriller
Paul Beaumont, científico y humanista, después de muchos años de estudio, descubre una revolucionaria teoría, pero su protector (Marc McDermott) se la roba y, además, seduce a su esposa (Ruth King). La ofensa se sella con una bofetada que provoca las burlas de toda la comunidad científica. Beaumont huye avergonzado y se refugia en un circo, donde se hace famoso como el payaso "que recibe las bofetadas". Los caprichos del destino hacen ... [+]
29 de mayo de 2023
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
145/28(29/05/23) Film silente a reivindicar del olvido por su poderío lírico y dramático en miscelánea con su incisiva estética visual que hace calar en el espectador una historia turbadora de masoquismo, venganza, amor, villanía, traición, y sacrificio. Fue la primera dirección del sueco Victor Seastrom en Estados Unidos, fichado por el Niño Maravilla Irving Thalberg para su compañía MGM, precisamente la primera producción en su totalidad de la compañía del logo del León (aunque se guardó para ser estrenada en Navidad, y por ello fue otra la película que dio inicio la mítica productora), que precisamente hace aquí su primera cortinilla inicial (creado por el publicista Howard Dietz) para la Metro, aunque el logo del depredador se vio por vez primera en la película “Polly of the Circus” (1917) de Goldwyn Pictures Corporation y pasó a MGM cuando Goldwyn se fusionó con otras dos compañías para formar MGM, precisamente un león tiene un protagonismo especial en el clímax del film. Obra cargada de dramatismo exacerbado (el brusco cambio de científico a payaso puede resultar exagerado, pero hay que darle esta licencia melodramática), propio del cine mudo donde los sentimientos resultan atomizados de modo punzante. Escrita por Carey Wilson, basada en la obra rusa homónima del dramaturgo ruso Leonid Andreyev, terminada en agosto de 1915, dos meses antes su estreno mundial en el Teatro de Arte de Moscú el 27 de octubre de 1915. Fue una producción de Broadway con gran éxito de crítica, utiliza traducción al inglés del ruso original de Gregory Zilboorg, se representó en 1922 y se estrenó en el Teatro Garrick el 9 de enero de 1922, con Richard Bennett (actor) interpretando el papel de "ÉL" en el escenario. El original ruso se convirtió en una película rusa en 1916.
El film al que me atengo tiene entre sus grandes aciertos la espléndida actuación de Lon Chaney (también descubierto por Irving Thalberg para la Universal Pictures, hace lo siga a su nuevo estudio para protagonizar el papel del payaso trágico) como el protagonista del título, Seastrom llamó a Chaney "el mejor actor en la historia de la pantalla o el escenario". Crea a un ser trágico, un científico apadrinado por un conde que termina traicionado por este, robándole su trabajo y a su amada, acaba ‘flagelándose’ psicológicamente enrolándose en un circo como payaso, siendo conocido enigmáticamente solo como Él (HE), a modo de haber perdido su identidad y ser nadie, ha roto con su pasado. Su número estrella es que una infinita cohorte de otros clowns le den bofetadas mientras el público ríe a mandíbula batiente, hasta que ‘muere’. Especie de acto de masoquismo para exponer su estado mental en el purgatorio y a la vez reflejar el sadismo de la sociedad disfrutando de un acto de crueldad como salvajes. Tipo patético que Chaney encarna de forma magistral con su extraordinaria capacidad expresiva, en una travesía donde encuentra una razón de ser en el amor platónico a una bella amazona (Norma Shearer, pareja entonces de Irving Thalberg), tenido con ella hermosas escenas mientras ella le cose el bolsillo donde deposita su ‘corazón’. Maravilloso Chaney como el payaso triste, ese que debe hacer reír, ese que lleva pintada una estiradísima sonrisa en su rostro y por dentro es un fantasma, que disfruta siendo humillado una y otra vez, un ser que vive rebozado en la angustia de la amargura, vive en círculo vicioso representado con gran visualidad por esos clowns que hacen girar el mundo en los clips hábilmente intercalados a modo de leit motive, dando una dimensión superior al drama, Grande Chaney. George Davis, popular payaso europeo, entrenó a Chaney en su papel de payaso.
El científico obsesionado y adicto al trabajo Paul Beaumont (Lon Chaney) descubre sin contemplaciones en una ceremonia académica que su tortuoso patrón, el barón de Regnard (elegante malvado Marc McDermott), ha robado su trabajo "sobre los orígenes de la humanidad". el patrón también se lleva a la egoísta esposa de Beaumont, María (buena Ruth King). Ambos consideran a Paul como un tonto. Paul, humillado, recuerda a todos sus colegas riéndose al unísono cuando el Barón lo abofeteó y convierte esa parte en un acto de payaso, donde trabaja para un pequeño circo en las afueras de París y se anuncia a sí mismo como "El que recibe una bofetada". Pronto se convierte en uno de los payasos más famosos de Francia, ya que al público le encanta ver cómo lo abofetean hasta cien veces en su acto. El payaso se enamora en secreto de la hermosa jinete a pelo Consuelo (preciosa, además de tener buena química con Chaney Norma Shearer), quien ama a su apuesto compañero Bezano (John Gilbert). Cuando le dice esto a Consuelo, ella primero se aleja horrorizada y luego piensa que está bromeando y comienza a reírse de él. Su padre sin principios, el conde Mancini (Tully Marshall), recibe dinero del barón de Regnard y hace los arreglos para que su hija se case con el barón después de la función de la noche.
Sjöström (Seastrom en la traslación USA) demuestra gran ingenio en desarrollar la historia con mucha creatividad expresionista gracias a la fenomenal fotografía de Milton Moore, sugiriendo mucho, jugando con vigor narrativo con los elementos como ese corazón de trapo, con fundidos maravillosos como el del rostro del científico que se funde en el rostro del clown HE, o el también fundido de una joya que el villano pomposamente va a regalar a su pretendida y se transforma ingeniosamente en la guirnalda de flores que le engarza el amado a la pretendida en otro lugar mientras el padre de la misma urde su artero plan pecuario… (sigo en spoiler)
El film al que me atengo tiene entre sus grandes aciertos la espléndida actuación de Lon Chaney (también descubierto por Irving Thalberg para la Universal Pictures, hace lo siga a su nuevo estudio para protagonizar el papel del payaso trágico) como el protagonista del título, Seastrom llamó a Chaney "el mejor actor en la historia de la pantalla o el escenario". Crea a un ser trágico, un científico apadrinado por un conde que termina traicionado por este, robándole su trabajo y a su amada, acaba ‘flagelándose’ psicológicamente enrolándose en un circo como payaso, siendo conocido enigmáticamente solo como Él (HE), a modo de haber perdido su identidad y ser nadie, ha roto con su pasado. Su número estrella es que una infinita cohorte de otros clowns le den bofetadas mientras el público ríe a mandíbula batiente, hasta que ‘muere’. Especie de acto de masoquismo para exponer su estado mental en el purgatorio y a la vez reflejar el sadismo de la sociedad disfrutando de un acto de crueldad como salvajes. Tipo patético que Chaney encarna de forma magistral con su extraordinaria capacidad expresiva, en una travesía donde encuentra una razón de ser en el amor platónico a una bella amazona (Norma Shearer, pareja entonces de Irving Thalberg), tenido con ella hermosas escenas mientras ella le cose el bolsillo donde deposita su ‘corazón’. Maravilloso Chaney como el payaso triste, ese que debe hacer reír, ese que lleva pintada una estiradísima sonrisa en su rostro y por dentro es un fantasma, que disfruta siendo humillado una y otra vez, un ser que vive rebozado en la angustia de la amargura, vive en círculo vicioso representado con gran visualidad por esos clowns que hacen girar el mundo en los clips hábilmente intercalados a modo de leit motive, dando una dimensión superior al drama, Grande Chaney. George Davis, popular payaso europeo, entrenó a Chaney en su papel de payaso.
El científico obsesionado y adicto al trabajo Paul Beaumont (Lon Chaney) descubre sin contemplaciones en una ceremonia académica que su tortuoso patrón, el barón de Regnard (elegante malvado Marc McDermott), ha robado su trabajo "sobre los orígenes de la humanidad". el patrón también se lleva a la egoísta esposa de Beaumont, María (buena Ruth King). Ambos consideran a Paul como un tonto. Paul, humillado, recuerda a todos sus colegas riéndose al unísono cuando el Barón lo abofeteó y convierte esa parte en un acto de payaso, donde trabaja para un pequeño circo en las afueras de París y se anuncia a sí mismo como "El que recibe una bofetada". Pronto se convierte en uno de los payasos más famosos de Francia, ya que al público le encanta ver cómo lo abofetean hasta cien veces en su acto. El payaso se enamora en secreto de la hermosa jinete a pelo Consuelo (preciosa, además de tener buena química con Chaney Norma Shearer), quien ama a su apuesto compañero Bezano (John Gilbert). Cuando le dice esto a Consuelo, ella primero se aleja horrorizada y luego piensa que está bromeando y comienza a reírse de él. Su padre sin principios, el conde Mancini (Tully Marshall), recibe dinero del barón de Regnard y hace los arreglos para que su hija se case con el barón después de la función de la noche.
Sjöström (Seastrom en la traslación USA) demuestra gran ingenio en desarrollar la historia con mucha creatividad expresionista gracias a la fenomenal fotografía de Milton Moore, sugiriendo mucho, jugando con vigor narrativo con los elementos como ese corazón de trapo, con fundidos maravillosos como el del rostro del científico que se funde en el rostro del clown HE, o el también fundido de una joya que el villano pomposamente va a regalar a su pretendida y se transforma ingeniosamente en la guirnalda de flores que le engarza el amado a la pretendida en otro lugar mientras el padre de la misma urde su artero plan pecuario… (sigo en spoiler)
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
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spoiler:
El director se regocija en mostrar un mundo cruel, insano, patológico en la forma de entusiasmarse con el dolor ajeno, algo que no ha perdido resonancia a través del tiempo, recuerdo en los 70 un dueto español, Lussón y Codeso el segundo recibía continuas bofetadas del primero, una sociedad viciada que reía a carcajadas ante tal desvarío. Todo ello en un desarrollo ágil, apasionante en la forma de ir construyendo el crescendo dramático, con el intercalado del romance núbil de la parejita de jinete (John Gilbert) y amazona (Norma Shearer), siendo maravilloso el montaje cuando vemos a la parejita de enamorados en el bosque como dos tortolitos declarándose amor eterno y por toro lado al padre de ella ‘vendiéndola’ por 1000 francos al Conde para desembocar en un rush final, la pureza frente al vil materialismo. Para tener todo un estupendo clímax cuando He encierra al barón y al Conde con un ‘vecino salvaje’ en la puerta contigua, donde lo de ‘El que ríe el último’ cobra sentido. Todo para tener una emociónate coda en el hermoso epílogo, de los que cala (spoiler).
El director se regocija en mostrar un mundo cruel, insano, patológico en la forma de entusiasmarse con el dolor ajeno, algo que no ha perdido resonancia a través del tiempo, recuerdo en los 70 y 80 un dueto español donde Eran famosos porque uno de ellos de vez en cuando propinaba en medio de la actuación un guantazo al otro (perdón, pero no me acuerdo del nombre), una sociedad viciada. Todo ello en un desarrollo ágil, apasionante en la forma de ir construyendo el crescendo dramático, con el intercalado del romance núbil de la parejita de jinete (John Gilbert) y amazona (Norma Shearer), siendo maravilloso el montaje cuando vemos a la parejita de enamorados en el bosque como dos tortolitos declarándose amor eterno y por toro lado al padre de ella ‘vendiéndola’ por 1000 francos al Conde para desembocar en un rush final, la pureza frente al vil materialismo. Para tener todo un estupendo clímax cuando He encierra al barón y al Conde con un ‘vecino salvaje’ en la puerta contigua, donde lo de ‘El que ríe el último’ cobra sentido. Todo para tener una emociónate coda en el hermoso epílogo, de los que cala (spoiler)
Spoiler:
Final: He se ha enterado de que el barón ha vendido a su hija al Conde. He ve en la habitación contigua a donde están que hay un león enjaulado y lo pone contra la puerta abriendo la trampilla que da la misma. Entra en el cuarto por otra puerta donde están los dos tipos y la cierra con llave. El payaso se revela al Barón y le dice que vea “quién es el último que ríe”. El Conde apuñala al payaso con su espada-bastón, pero sin que ellos lo supieran, los dos tipos deciden huir dejando malherido a HE allí, y lo hacen por la puerta abierta que ellos no saben da a la jaula abierta del león. Cuando se abre la puerta, el león devora tanto al Conde como al Barón. Cuando HE está pidiendo al león que termine el trabajo (ósea, que lo devore a él), llega la domadora y encierra al león. HE decide actuar malherido en la función, pero cae al suelo en medio del escenario, y en sus últimos suspiros le dice a Consuelo que ahora ambos son felices, ella es libre para casarse con el hombre que ama y para él su sufrimiento ha llegado a su fin.
En 2017, la película fue seleccionada para su conservación en el Registro Nacional de Cine de los Estados Unidos por la Biblioteca del Congreso por ser "cultural, histórica o estéticamente significativa"; Hay un remake argentino dirigido por Boris H. Hardy de 1947 protagonizado por el gran Narciso Ibáñez Menta, “El que recibe las bofetadas”.
Esta película fue de gran influencia para cineastas como Tod Browning y sus “The Unkown” (1927) y “Freaks” (1932).
Notable drama que merece mucho la pena ver para ser testigos de cómo el cine mudo potenciaba las imágenes para provocar sensaciones en el espectador. Gloria Ucrania!!!
El director se regocija en mostrar un mundo cruel, insano, patológico en la forma de entusiasmarse con el dolor ajeno, algo que no ha perdido resonancia a través del tiempo, recuerdo en los 70 y 80 un dueto español donde Eran famosos porque uno de ellos de vez en cuando propinaba en medio de la actuación un guantazo al otro (perdón, pero no me acuerdo del nombre), una sociedad viciada. Todo ello en un desarrollo ágil, apasionante en la forma de ir construyendo el crescendo dramático, con el intercalado del romance núbil de la parejita de jinete (John Gilbert) y amazona (Norma Shearer), siendo maravilloso el montaje cuando vemos a la parejita de enamorados en el bosque como dos tortolitos declarándose amor eterno y por toro lado al padre de ella ‘vendiéndola’ por 1000 francos al Conde para desembocar en un rush final, la pureza frente al vil materialismo. Para tener todo un estupendo clímax cuando He encierra al barón y al Conde con un ‘vecino salvaje’ en la puerta contigua, donde lo de ‘El que ríe el último’ cobra sentido. Todo para tener una emociónate coda en el hermoso epílogo, de los que cala (spoiler)
Spoiler:
Final: He se ha enterado de que el barón ha vendido a su hija al Conde. He ve en la habitación contigua a donde están que hay un león enjaulado y lo pone contra la puerta abriendo la trampilla que da la misma. Entra en el cuarto por otra puerta donde están los dos tipos y la cierra con llave. El payaso se revela al Barón y le dice que vea “quién es el último que ríe”. El Conde apuñala al payaso con su espada-bastón, pero sin que ellos lo supieran, los dos tipos deciden huir dejando malherido a HE allí, y lo hacen por la puerta abierta que ellos no saben da a la jaula abierta del león. Cuando se abre la puerta, el león devora tanto al Conde como al Barón. Cuando HE está pidiendo al león que termine el trabajo (ósea, que lo devore a él), llega la domadora y encierra al león. HE decide actuar malherido en la función, pero cae al suelo en medio del escenario, y en sus últimos suspiros le dice a Consuelo que ahora ambos son felices, ella es libre para casarse con el hombre que ama y para él su sufrimiento ha llegado a su fin.
En 2017, la película fue seleccionada para su conservación en el Registro Nacional de Cine de los Estados Unidos por la Biblioteca del Congreso por ser "cultural, histórica o estéticamente significativa"; Hay un remake argentino dirigido por Boris H. Hardy de 1947 protagonizado por el gran Narciso Ibáñez Menta, “El que recibe las bofetadas”.
Esta película fue de gran influencia para cineastas como Tod Browning y sus “The Unkown” (1927) y “Freaks” (1932).
Notable drama que merece mucho la pena ver para ser testigos de cómo el cine mudo potenciaba las imágenes para provocar sensaciones en el espectador. Gloria Ucrania!!!