Serie en la que todo el mundo tiene diálogos con frases que parecen meditadas pero a toda hostia para justificar el que los billionarios lo son por méritos, porque son los más listos.

Me parece una oda a la justificación de la desigualdad que sólo los tontos se tragarán… o sea, to dios.

Como he dicho, los diálogos, forzada y pretendidamente sesudos, hacen que el producto final sea un trabalenguas que no va a ningún sitio salvo para ofrecer un escaparate de estilos de vida lujosos y mierdas de esas.

Aun así, si estas aburrido, te la puedes tragar perfectamente, ya que, dado el nivel del resto, si ya has visto lo mejor y estás ansioso por empezar algo nuevo, esta serie da el pego.