Es entretenida, sin más. Una vez que empiezas a verla, tienes que seguir para ver como acaba y no te aburres, ni te agobias, ni te duermes, pero...Los personajes no enganchan, ni siquiera Dennis Quaid, que si dicen que ha renacido, no será precisamente por esta película. El argumento podría haber dado mucho más de sí, y el principio y final de la película, en teoría los platos fuertes, dejan mucho que desear en cuanto a espectacularidad. Y por cierto, hay algo que sí me ha agobiado: el personaje de Elliott, sacado de una de monstruitos, y la música, que a mi modo de ver, fuerte y estridente, no le va ni a una de terror.