Media votos
7,2
Votos
242
Críticas
36
Listas
0
Recomendaciones
- Sus votaciones a categorías
- Contacto
-
Compartir su perfil
Voto de The Psycho:
8
7,5
132.458
Ciencia ficción. Acción. Thriller
En un futuro no muy lejano, Gran Bretaña se ha convertido en un país totalitario dirigido con mano de hierro por un tirano (John Hurt). Una tarde, tras el toque de queda, Evey (Natalie Portman) es rescatada en plena calle por un misterioso enmascarado cuyo nombre es "V" (Hugo Weaving). El extraño personaje le explica cuáles son sus planes para recuperar la libertad. En efecto, todas las acciones de V tendrán como objetivo hacer estallar ... [+]
21 de marzo de 2024
Sé el primero en valorar esta crítica
Ya durante todo el siglo XX, y por supuesto durante lo que va del XXI, el noveno arte ha sido origen de numerosas obras maestras, que rivalizan en mérito con las más grandes obras de cualquier otra manifestación artística. Quien no sea aficionado a los cómics, y los considere un arte menor, sin duda es porque no les ha dado nunca la oportunidad de enamorarle, o sólo ha leido unas pocas obras, y han sido éstas mediocres, o demasiado orientadas a público infantil. Le diría que no sea obtuso, y que se lance de cabeza a descubrirlo, porque hay obras que son maravillas fascinantes. Por supuesto, a alguien tan novato no le recomendaría jamás que se leyera "V de Vendetta", de la misma forma que no le recomendaría jamás a alguien nuevo en el mundo del cine que se viera "Ciudadano Kane", "El padrino", o "El hombre elefante".
Pues bien, en ese mundo del cómic (arte que respeto muchísimo y al que soy tan aficionado como a la literatura y al cine) ha habido grandísimos guionistas a lo largo de diferentes épocas. Pero, en especial, a menudo se habla de "las tres grandes emes" (M), para referirse a tres autores que son considerados, para muchos, los mejores de la historia, y que desarrollaron sus mejores obras a partir sobretodo de los 80, y también en los 90. Estoy hablando de Frank Miller (mi favorito), autor de muchísimos grandes cómics, y varios de ellos obras maestras, tales como "Sin City", "300", "El regreso del caballero oscuro", "Batman: Año Uno", o "Born again"; Grant Morrison (el más joven de los tres), que se desarrolló sobretodo en los 90, menos adaptado al cine que los otros dos, y autor de otras obras maestras como "Arkham Asylum", "Los invisibles", "Animal Man" o "All-star Superman"); y, por supuesto, Alan Moore, seguramente el considerado más unánimemente como el mejor guionista de la historia, el más adaptado al cine, y autor de muchísimas grandes obras, como "The League of extraordinary Gentlemen", o su etapa de "La cosa del pantano", y diría que de muchas obras maestras, consideradas entre los mejores cómics de la historia, como "Watchmen", "From Hell", o este "V de vendetta".
A partir de esta magnífica obra, y sobretodo gracias al trabajo como guionistas de lujo (y también productores) de Larry y Andy Wachowski (ahora Lana y Lilly Wachowski, respectivamente), James McTeigue rodó una gran película, en la que se adapta muy bien una obra muy difícil, y eligiendo a mi modo de ver muy acertadamente qué partes incluir y cuáles desechar.
Pues bien, en ese mundo del cómic (arte que respeto muchísimo y al que soy tan aficionado como a la literatura y al cine) ha habido grandísimos guionistas a lo largo de diferentes épocas. Pero, en especial, a menudo se habla de "las tres grandes emes" (M), para referirse a tres autores que son considerados, para muchos, los mejores de la historia, y que desarrollaron sus mejores obras a partir sobretodo de los 80, y también en los 90. Estoy hablando de Frank Miller (mi favorito), autor de muchísimos grandes cómics, y varios de ellos obras maestras, tales como "Sin City", "300", "El regreso del caballero oscuro", "Batman: Año Uno", o "Born again"; Grant Morrison (el más joven de los tres), que se desarrolló sobretodo en los 90, menos adaptado al cine que los otros dos, y autor de otras obras maestras como "Arkham Asylum", "Los invisibles", "Animal Man" o "All-star Superman"); y, por supuesto, Alan Moore, seguramente el considerado más unánimemente como el mejor guionista de la historia, el más adaptado al cine, y autor de muchísimas grandes obras, como "The League of extraordinary Gentlemen", o su etapa de "La cosa del pantano", y diría que de muchas obras maestras, consideradas entre los mejores cómics de la historia, como "Watchmen", "From Hell", o este "V de vendetta".
A partir de esta magnífica obra, y sobretodo gracias al trabajo como guionistas de lujo (y también productores) de Larry y Andy Wachowski (ahora Lana y Lilly Wachowski, respectivamente), James McTeigue rodó una gran película, en la que se adapta muy bien una obra muy difícil, y eligiendo a mi modo de ver muy acertadamente qué partes incluir y cuáles desechar.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
spoiler:
El resultado es una película muy bella, que refleja esa futura Inglaterra distópica, nazi y dictatorial que Moore ideó, y a ese protagonista, trasunto de El fantasma de la ópera, un buenísimo Hugo Weaving, que no necesita enseñar su rostro, sino al que le basta con su voz y sus gestos para hacer un gran papel.
Enloquecido por un pasado de tortura y encierro como víctima de las causas que originaron dicha dictadura, y a su modo noble y a la vez violento, tiene la intención de arreglar con sus actos la situación y devolverle a la población lo que él más ama, la libertad. A cualquier precio. Para ello es capaz de causar destrucción, de arriesgar su vida e incluso entregarla, de poner en pelgro la vida de inocentes y segar de cuajo la de culpables, e incluso de maltratar y torturar a su casual aliada (una también magnífica Natalie Portman), si con ello es capaz de hacerla comprender la importancia que todo ser humano debe darle a esa libertad.
En verdad, es una magnífica película. Si para mí se queda en una obra notable, y no alcanza el sobresaliente, es simplemente porque, aunque sea una maravilla de película, tiene la desgracia (y la suerte, ya que en caso contrario no existiría) de ser la adaptación de una obra maestra absoluta. Y en las comparaciones siempre hay un lado de la balanza que sale perdiendo. El propio Alan Moore se negó y quiso impedir que fuera adaptada, pero siendo la propiedad intelectual de DC Cómics, no lo consiguió, motivo por el cuál no quiso aparecer (y no aparece) en los créditos del film, sino que se nombra sólo a David Lloyd, el dibujante. Pero la película es tan buena que, para que os hagáis una idea, diría que compararla con el cómic es como comparar la velocidad de Usain Bolt con la de Flash. Un fracaso, y, pese a todo, el señor Bolt era un espectáculo.
Enloquecido por un pasado de tortura y encierro como víctima de las causas que originaron dicha dictadura, y a su modo noble y a la vez violento, tiene la intención de arreglar con sus actos la situación y devolverle a la población lo que él más ama, la libertad. A cualquier precio. Para ello es capaz de causar destrucción, de arriesgar su vida e incluso entregarla, de poner en pelgro la vida de inocentes y segar de cuajo la de culpables, e incluso de maltratar y torturar a su casual aliada (una también magnífica Natalie Portman), si con ello es capaz de hacerla comprender la importancia que todo ser humano debe darle a esa libertad.
En verdad, es una magnífica película. Si para mí se queda en una obra notable, y no alcanza el sobresaliente, es simplemente porque, aunque sea una maravilla de película, tiene la desgracia (y la suerte, ya que en caso contrario no existiría) de ser la adaptación de una obra maestra absoluta. Y en las comparaciones siempre hay un lado de la balanza que sale perdiendo. El propio Alan Moore se negó y quiso impedir que fuera adaptada, pero siendo la propiedad intelectual de DC Cómics, no lo consiguió, motivo por el cuál no quiso aparecer (y no aparece) en los créditos del film, sino que se nombra sólo a David Lloyd, el dibujante. Pero la película es tan buena que, para que os hagáis una idea, diría que compararla con el cómic es como comparar la velocidad de Usain Bolt con la de Flash. Un fracaso, y, pese a todo, el señor Bolt era un espectáculo.