El relanzamiento de la franquicia de las Tortugas ninja se preveía un desastre completo desde las primeras imágenes conocidas, luego del escándalo por el diseño de los personajes y después de saber que detrás del proyecto se encontraba a cargo en la producción Michael Bay. Y la verdad que la película se salva del desastre, pero tampoco llega a ser una buena película.


Partiendo de una premisa muy parecida a la de la serie televisiva, la ciudad de Nueva York está bajo la amenaza de un grupo delictivo denominado el Clan del Pie, y un grupo de misteriosos justicieros aparecen entre las sombras sin dejarse ver, para someterlos. Solo la reportera de televisión April O´Neal logra sacar una foto de ellos.

Pronto, April y las tortugas con nombre de pintores del Renacimiento junto a la rata Splinter, habrán de conocer el nexo que los une, y deberán hacerle frente al malvado Destructor.

Con un guión bastante básico, plano y que no profundiza en nada, el gran hallazgo en estas nuevas Tortugas Ninja está en el diseño de cada uno de los cuatro personajes, lejos de las obsoletas botargas de las películas de los 90, aprovechando al máximo las bondades de las nuevas tecnologías y con una seguidilla de diálogos graciosos e incluso hilarantes por momentos, llenos de referencias a la cultura pop.

Los aciertos no sólo se remiten a la comicidad bien lograda de las tortugas, una par de secuencias sobresalen sobre el resto del film; la inicial y una persecución en la nieve, con una buena dosis de diálogos chispeantes y un buen despliegue de acción trepidante. Otro logro a destacar es la corta duración de la película.

Y mucho más que eso no hay, el resto del filme es una combinación de secuencias tomadas de otras películas muy recientes, (el villano intenta esparcir una sustancia tóxica que aniquilará a la humanidad desde lo alto de la torre de un edificio, como en Spiderman), con peleas interminables y mal filmadas y Megan Fox.

Una película que sin duda disfrutarán los más chicos, con buena dosis de comicidad y que deja todo listo para próximas entregas de una inevitable nueva saga.