Entretenida aunque en ocasiones liosa serie de piratas, tiene cosas buenas como el tratamiento de sus personajes y su ambiguedad moral y manifiesto egoísmo, por contrario sigue la moda americana de pintar a todos los actores y actrices, guapos y relucientes, como en un anuncio del corte ingles, eso resta realismo a la historia y a la época que retrata, por lo demás nada tiene que envidiar a las grandes películas de piratas, con espectaculares escenas de acción, tormentas, persecuciones etc etc. Entre todos la figura del capitán Flint (magnifico Toby Stephens) manipulador nato, superviviente en mil batallas y un estratega genial, siempre piensa mas alla que sus numerosos enemigos, también las mujeres tienen papeles predominantes en una época ciertamente machista, dominadoras, manipuladoras y despiadas cuando la ocasión lo requiere, un grato entretenimiento, con piratas que se comportan como adultos, no como una atracción de parque temático.